Hace años que Europa ha asumido el liderazgo de la lucha contra el cambio climático.
Uno de los mecanismos más efectivos ha sido el autoimponernos un precio a las emisiones de CO2. Con este impuesto, hemos dejado fuera de mercado a nuestras térmicas y en la cuerda floja a los ciclos combinados, pero el verdadero daño lo estamos sufriendo en nuestro tejido industrial. Sobre todo en las empresas electro-intensivas (grandes consumidoras de corriente), que han visto cómo el precio de la luz se disparaba perdiendo competitividad en un mercado cada vez más global. Aquí debemos tener en cuenta que no hablamos solo de competir dentro de Europa entre empresas del mismo sector, debemos hablar de competir con productos importados que no han tenido que asumir ese coste extra del CO2.
Con este panorama, y para garantizar no solo la viabilidad de las empresas ya implantadas como Alcoa, Megasa, Ferroglobe, o la misma Stellantis, sino la competitividad de aquellas nuevas que quieren asentarse en Galicia, es imprescindible acelerar la repotenciación de los parques eólicos obsoletos e instalar cuanto antes los nuevos. Es fundamental también no olvidarnos del almacenamiento energético del excedente para garantizar la estabilidad del sistema; los bombeos hidráulicos y el hidrógeno son los que presentan un mayor potencial.
La nueva generación renovable y el almacenamiento de excedentes son la apuesta como país, para conseguir una energía estable y a precios competitivos que no nos obliguen otra vez a emigrar por la falta de trabajo.
Los vecinos somos los primeros en pelear para que estos parques salgan adelante. Queremos empleos estables y de calidad que mejoren nuestra calidad de vida, y en el horizonte solo vemos despidos.
Las Administraciones, como representantes del pueblo y empresas energéticas, tienen que aprovechar este momento para modernizar el medio rural mejorando la conectividad y la movilidad, garantizando nuestro presente y el futuro de nuestras familias.
Marcos Higinio Prieto Seijas es secretario de Política Industrial de UGT-FICA-Endesa Galicia