¡Vallecano de mierda!

Fernanda Tabarés
Fernanda Tabarés OTRAS LETRAS

OPINIÓN

Alberto Ortega | EUROPAPRESS

29 may 2024 . Actualizado a las 15:33 h.

El lunes, un tipo se puso detrás de una verja y empezó a insultar a Pablo Iglesias con una furia viscosa que daba entre miedo y vergüenza. El sujeto arrancó con los clásicos, los académicos sinvergüenza, miserable y asqueroso, pero enseguida su chaladura necesitó más metralla y recurrió al «sal fuera si tienes cojones», la versión más genital del «eso me lo dices fuera» que hace unos días se escuchó en el Senado, diligentes como están sus señorías en representar lo mejor de todos nosotros. Tras las invocaciones más normativas, el individuo se puso creativo y, tras darle en la oreja al excoletas con un doloroso vendeobreros, se vino arriba y culminó su obra con un desmesurado y monstruoso ¡vallecano! que adjetivó con el refuerzo escatológico que toda mente privilegiada guarda en su repertorio, ese célebre de mieeerrda que convierte en porquería todo lo que toca.

Hay que tener mucho talento para inventar insultos así, ser de una estirpe como la de Camilo Sesto, que en su día zanjó el misterio de su vida con un brutal: «De mí se han dicho auténticas barbaridades: que tengo sida, que soy catalán…», tal y como consignaba esta semana en redes el librero Xacobe Pato.

Pero es que hubo otro gran insulto esta semana, de procedencia además inesperada, pues salió de la boca del mismísimo papa, lo que demuestra que, como mi reino, los buenos vituperios no son de este mundo. Francisco instó a vigilar el reclutamiento de homosexuales en los seminarios porque al parecer en estos centros hay mucha «mariconería», aunque ya digo que si esos maricones de los seminarios son como los míos tienen mucha suerte. Estamos en un momento de explosión creativa, en un duelo de talentos a la altura de los de Góngora y Quevedo. Vigilen sus fruteros. No digo más.