¡Ay, Telefónica!
¡Cómo se echa de menos el monopolio de Telefónica en materia de telecomunicaciones! Por lo menos sabías a qué te atenías. Llevo una semana esperando a que una compañía «de las nuevas» haga un empalme en el cable que rompieron unos aprendices de jardineros en la finca de al lado. Adolfo l. Pérez.
¿Sabe si Sánchez está en gananciales?
La cuestión parece pertinente porque si fuera así, todo aquello que doña Begoña pudiera percibir ya fuera en metálico o en especie, iría, como todo el mundo sabe, a parar a la sociedad de gananciales. Y de paso en su 50 % correspondiente, al propio Sánchez. Y es que la diferencia entre un matrimonio y una pareja de hecho, como en el caso del novio de Ayuso, es que la figura del matrimonio genera de por sí, ante el resto de la sociedad, una entidad jurídica propia con su régimen legal correspondiente; fruto de un compromiso y de una voluntad de permanencia en el tiempo, distinta en muchos casos a una situación de simple convivencia. María Eugenia Ruiz de Azcárate. A Coruña.
Ganaron los laboristas
Han sido tan contundentes, unánimes y notorios los distintos adjetivos empleados por los medios de comunicación nacionales e internacionales para calificar la inapelable victoria laborista en Gran Bretaña que prácticamente no quedan otros por utilizar.
Pero la realidad es esta: que la división de la derecha ha dado al laborismo la mayor victoria en casi 200 años. Inapelable y sin tiquismiquis. Lección a aprender por esta España nuestra. En nuestro país estamos divididos y así nos luce el pelo. Aquí no hay quien de momento eche al sanchismo de los estamentos de poder. Solamente con una aplastante victoria electoral sería posible. Pero falta la imprescindible unidad en las urnas. No nos quejemos, pues. Tomás Fernández Martín. A Coruña.