Kazajistán: descarbonización y lucha contra la contaminación

Ricardo García Mira CATEDRÁTICO DE PSICOLOGÍA SOCIAL DE LA UNIVERSIDADE DA CORUÑA. CATEDRÁTICO INVITADO EN LA EAST KAZAKHSTAN TECHNICAL UNIVERSITY

OPINIÓN

22 abr 2025 . Actualizado a las 05:00 h.

Hace unas semanas, en Oskemen, al este de Kazajistán, coincidió la celebración del Nauryz, fiesta nacional que recibe la primavera y simboliza la fertilidad, el amor y la amistad. Con temperaturas entre -20ºC y 0ºC. El ambiente festivo fomenta las conversaciones sobre la limpieza ambiental: hay que frenar la contaminación. Cada año mueren prematuramente en Kazajistán más 6.000 personas por problemas con la calidad del aire, con altísimos costes económicos. La atmósfera acumula partículas de metales pesados de fábricas locales y el agua baja contaminada por los dos ríos que confluyen en la ciudad. La extracción de minerales para la exportación da oxígeno a la economía local, pero se lo quita a la ciudadanía, que se bate cada día con patologías respiratorias, muchas de ellas conducentes a enfermedades letales a medio o largo plazo. La extracción de minerales y su conversión en metales (uranio, titanio, zinc o berilio) son industrias que proporcionan empleo y retienen población, pero a un alto precio para los que sufren en silencio el impacto sobre su salud.

Las mujeres alcanzan alto estatus, al ocupar muchos de los cargos académicos en la universidad, incluida la actual rectora de la East Kazakhstan Technical University (EKTU). La contribución femenina a la educación es valiosa, sin duda, pero —al tiempo— chocante: la industria se reserva a los hombres, pues en ella pueden obtener mejores salarios. Es parte de la cultura local, que aún considera deber masculino la mayor aportación económica a la familia y el negocio de máximo prestigio, el de los recursos naturales. Con todo, Kazajistán es un país que apuesta por el «bienestar ordenado», viejo objetivo de la UE. De ahí su interés por colaborar en proyectos socioambientales con Bruselas.

El Gobierno kazajo conecta así con el ambicioso programa de I+D+i e institucionaliza innovación y participación ciudadana, con una apuesta decidida por la descarbonización y por crear sinergias con la urgente necesidad de reducir la contaminación. Esta es la razón por la cual, desde nuestro amado Centro Tecnológico Citeec de la Universidade da Coruña, estemos presentes en la EKTU para realizar transferencia sobre aspectos sociales de la transición ecológica. Es solo el inicio de lo que se espera que llegue a ser una larga colaboración y un amplio aprendizaje mutuo.