Cada vez somos más pobres

Carlos Sánchez-Tembleque PROFESOR DE LA ESCUELA UNIVERSITARIA DE RELACIONES LABORALES DE LA UNIVERSIDADE DA CORUÑA

OPINIÓN

María Pedreda

19 jun 2025 . Actualizado a las 12:05 h.

El INE publicó la Encuesta Anual de Estructura Salarial (EAES) correspondiente al año 2023. Esta encuesta se considera el indicador más solvente para medir la ganancia bruta por trabajador. Se publica anualmente desde el año 2008.

Economistas de prestigio, como Ramón Rallo o José Carlos Díez, han analizado la evolución salarial y renta disponible en términos reales, es decir, descontando la inflación e impuestos, desde el inicio de la publicación de este indicador salarial en el año 2008 hasta la actualidad (el 2023 en el caso salarial).

¿Por qué analizar la evolución desde el 2008? El 2008 es un año de referencia, año de final e inicio. Marca el final de la anterior etapa de gran expansión económica, que se prolongó desde nuestra entrada en el euro a finales de los años 90 hasta ese año, fijando la menor tasa de paro de la historia de la democracia de España (8 %), y fija el inicio de la gran crisis financiera, que se extendió desde el 2009 hasta el 2014.

¿Cómo han evolucionado nuestros salarios medios desde el 2008 hasta el 2023?

En el 2008, el salario medio en España a tiempo completo, según EAES, se situaba en 24.052 euros anuales, colocándose en el 2023 en 32.168 euros, un aumento nominal del 33,7 % en quince años, en principio considerable.

Pero como nos interesa el aumento real del salario medio en ese período, lo primero que tenemos que considerar es la inflación.

La inflación en estos quince años fue del 31,2 %, por tanto el salario medio real del año 2008 en términos del 2023 se eleva a 31.557 euros (24.052,8 multiplicado por 1,312).

Así, el crecimiento en términos reales de los salarios medios sería de 31.557 euros (2008 puesto en euros del 2023) a 32.168,1 euros (dato conocido del 2023).

El crecimiento en 15 años de los salarios medios se reduce ya a apenas el 2 %, o 610 euros anuales, inferior a la mayoría de países de Europa y OCDE, países donde se disfruta de pleno empleo. España, con una tasa de paro de 11,4 %, dobla sus registros y anota la más alta de Europa y OCDE.

Pero queremos conocer el salario real disponible y para ello hay que considerar, además de la inflación, los impuestos.

En cuanto a los impuestos directos, el tramo estatal del IRPF no se ha deflactado ningún año desde el 2008. Esto quiere decir que, a no ser que usted sea vasco o navarro (donde los impuestos están cedidos a sus comunidades y estas han deflactado las tablas), cada vez que nos suben el salario en convenio por causa de la inflación pasamos automáticamente a un tramo superior, y, como los impuestos son progresivos, pagamos un porcentaje más alto.

En el 2008, el salario medio a tiempo completo de 24.052 euros sufría un tipo medio en el IRPF de dicho año del 13,5 %. Si le aplicamos ese tipo al importe que supone ese salario en el 2023 considerando la inflación, 31.557 euros, nos quedaría en ese ejercicio del 2023 un salario real descontando impuestos de 27.297 euros.

Quince años después, y sin que ningún Gobierno haya deflactado las tablas del IRPF, la imposición para el salario medio a tiempo completo del 2023, 32.168 euros, sufre un tipo medio 2 puntos superior, 15,5 %.

Aplicando ese tipo medio del 2023 al salario medio de ese año, 32.168 euros, nos queda un salario real descontando impuestos de 27.182 euros.

Un trabajador español medio tenía en el 2023 un salario real anual descontando impuestos de 27.182 euros, 115 euros inferior del que contaba en el 2008 (27.297 euros), casi medio punto menos.

Dicho de otra forma: el trabajador español con salario medio gana hoy menos que hace quince años.

El comparativo se agravaría todavía más si consideráramos los impuestos indirectos en ambos períodos. El IVA en su tramo máximo es ahora del 21 %, frente al 17 % del 2008.

La conclusión es que somos más pobres que hace quince años. Es verdad que España lleva tres creciendo más que la media de Europa, pero, cuando lo divides por el número de habitantes (que está creciendo en más de 300.000 personas al año por la inmigración) y se elimina el efecto de inflación e impuestos, la renta disponible y por lo tanto los salarios medios descienden y no paran de alejarse del promedio europeo.

Algo estamos haciendo mal.