Más de 128.000 personas están ya inmunizadas, y 54.500 han iniciado el proceso
19 jun 2021 . Actualizado a las 05:00 h.Desde que el pasado 29 de diciembre Inocencio Corbal recibiese la primera dosis de la vacuna del coronavirus administrada en Ourense, se han puesto 300.000 vacunas en la provincia. Una efeméride que desde la gerencia del área sanitaria quisieron festejar con actos simbólicos en los tres espacios de vacunación masiva: Expourense y los hospitales comarcales de Verín y Valdeorras. En cada uno se eligió a una de las personas citadas para entregarle un diploma conmemorativa, ante la imposibilidad de saber en tiempo real cuándo se rebasaba la cifra.
Se sabía que iba a ser el viernes porque el balance oficial cerrado con los datos del jueves señalaba que ya se habían puesto 298.653. El 18 había citadas 4.580 personas, así que las trescientas mil dosis se verían ampliamente superadas. Sin contar los del viernes, en la provincia hay 128.138 que ya han completado la pauta tras recibir las dos dosis de AstraZeneca, Moderna o Pfizer; o la monodosis de Janssen, lo que supone el 42,27 % de la población. Además, otras 54.642 (el 18,32 % de los ourensanos) han comenzado el proceso de inmunización tras serle administrado un suero. Entre ambos grupos, más del 60 % de los 306.650 vecinos censados en Ourense están ya vacunados, lo que supone acercarse al 70 % en el que los expertos marcan el límite para lograr la inmunidad de grupo. Se denomina así a la situación que se produce cuando la mayoría de la población es inmune a una enfermedad, lo que ralentiza (se ha comprobado ya que una persona vacunada de covid puede contagiarse) la transmisión y también los efectos más graves ante una posible infección.
Todavía están pendiente de vacunar el 36,24 % de los ourensanos, mientras que el 3,17 % ya han dicho que no. Es un porcentaje muy bajo y que, de mantenerse en los grupos de edad que todavía quedan, supondría que la inmunidad de rebaño está más que asegurada.
En cuanto al porcentaje de noes entre los diferentes grupos de edad, de los mayores de 80 rechazaron la vacuna el 5,27 %; mientras que entre los de 70 y 79 el porcentaje bajó al 1,26. Entre los de 60 a 69, el 1,47 % dijeron que no. El peor dato se produjo entre los de 50 a 59, ya que el 15,65 % rechazaron vacunarse. Es el último grupo del que se tienen datos completos, ya que se ha administrado la primera dosis a todos los de ese tramo. La responsable de los equipos de vacunación, Pepa Rodríguez Araújo, resalta que el siguiente tramo (de los 40 a los 49 años, que están siendo llamados estos días para recibir la primera dosis) muestra una nueva aceptación masiva al proceso de inmunización, con mucha menos gente que está rechazando el suero.
En todos los casos, las cifras superan ampliamente las tasas de vacunación de la gripe, que es el otro inyectable que se administra de manera masiva a la población adulta (aunque en este caso solo a los mayores de 65 de forma indiscriminada). La campaña del 2020 se cerró superando el 75% de la población diana vacunada.