Tensión en 1918 por la falta de vagones para exportar los vinos de O Ribeiro

La condición de O Ribeiro como comarca eminentemente vitivinícola era más evidente que hoy en día en el siglo XIX y en las primeras décadas del XX. Los foros, las plagas, las enfermedades y los fenómenos meteorológicos condicionaban en exceso la actividad de los agricultores. Tanto, que la emigración era la alternativa cuando las crisis y los problemas económicos hacían inviable una normal calidad de vida. La comarca vinícola por excelencia de Galicia afrontaba hace ahora poco más de un siglo, en 1918, el enésimo problema que afectaba a los agricultores y a la presencia de los vinos de O Ribeiro en los mercados.

El 26 de marzo de 1918 La Voz de Galicia publicaba una noticia, bajo el epígrafe De Cenlle y Ribadavia, en la que se daba cuenta del malestar y la irritación evidente en la que vivía la comarca como consecuencia de las decisiones adoptadas por los responsables de la explotación de la línea ferroviaria. Las bodegas, viticultores y los corredores de vinos tenían en el camino de hierro un fiel y moderno aliado, el mismo que había dado la puntilla a los viejos medios de transporte y a los arrieiros y que les ayuda a poner el producto en las ciudades o a exportarlo, en el caso de las partidas destinadas a los puertos de la costa de la provincia de Pontevedra. 

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Aquel día de hace 105 años se dejaba constancia de la polémica y de la tensión que se vivía en la comarca. Así, se informaba que en la reunión de los alcaldes del partido judicial —celebrada en la casa consistorial de Ribadavia— se había acordado, entre otras cosas, remitir un telegrama al titular del Ministerio de Fomento. El mensaje a estampar en la comunicación telegráfica era claro y rotundo: «Ejecutando acuerdo nueve alcaldes partido Ribadavia, me dirijo a V. E. en nombre de ellos como alcalde de esta villa, rogándole tome urgentes medidas solucionar conflictos que se avecinan motivo falta de vagones para exportación vinos estación Ribadavia, anuncio Compañía ferroviaria Ourense-Vigo suprimiendo desde 1º de abril tarifa especial núm. 7 para vinos, escasez y carestía de azufres y sulfatos y temores existencias maíz».

La tormenta perfecta parecía ceñirse sobre O Ribeiro: el vino no se podía sacar de la comarca, los productos para los tratamientos fitosanitarios en el viñedo subían de precio y, para complicar aún más las cosas, los alimentos se encarecían.

 Posibles disturbios

En el telegrama no se andaban con rodeos los alcaldes de la comarca, y se vaticinaban posibles desórdenes. Así, se insistía en que «siendo esta región vinícola casi exclusivamente», se debía atender con especial preferencia las facilidades que estaban en vigor para la exportación de vinos. Y no permitir a la Compañía Norte la retención de vagones del tramo Ourense-Vigo al pasar por Monforte. Era la principal causa de la paralización y la frase final de la comunicación remitida al ministro de Fomento era rotunda: «Témense disturbios si falta protección oficial». También se le remitían las quejas por la situación a la que se enfrentaba la comarca al diputado en Cortes por el distrito, José Estévez Carrera. Se solicitaba encarecidamente «su apoyo en cuestiones de tan vital interés para esta comarca».

Y mientras tal circunstancia arrojaba sombras y preocupación sobre los ribeiraos, también se informaba sobre futuros proyectos en relación con el ferrocarril en la zona. Así, entre las noticias breves que acompañaban a la referida a los problemas por la falta de vagones para exportar el vino, se indicaba que «estuvo en Ribadavia, continuando los trabajos que le están confiados sobre los ferrocarriles de esta región, la comisión militar que componen el teniente coronel de Estado Mayor D. Vicente Valderrama, el capitán del mismo cuerpo D. Luis Medina y el capitán de Ingenieros D. Julio Zaragüeta».

 Ferrocarriles secundarios

Los planes ferroviarios para Galicia eran una reclamación y un conflicto constantes. Se anunciaba la subasta de la nueva línea de los caminos de hierro, entre Villafranca y Villaodriz (A Pontenova, Lugo), y desde La Voz de Galicia se aprovechaba para recordar que la comunidad tenía un grave problema en materia de comunicaciones ferroviarias. Se reclamaban más proyectos para la comunidad y se destacaba que en el plan de ferrocarriles secundarios había varias líneas de vital importancia. Entre las mismas estaba el trazado de A Estrada a Ourense, con continuidad hacia Verín y Chaves.

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