La calidad del filial barcelonista desarboló a un Ourense CF sin premio para su valentía (3-0)
OURENSE
Un penalti riguroso y dos genialidades tumbaron al equipo de Rubén Domínguez
08 sep 2024 . Actualizado a las 00:10 h.Los goles siguen siendo la clave del fútbol y la calidad los atrae, incluso en combinados tan jóvenes como los que presenta el FC Barcelona en su filial. El Ourense CF salió goleado de la ciudad condal, a causa de los chispazos de talento local que le apagaron la luz, por mucho que fueron capaces de dominar el encuentro en distintas fases y administrar mejor el cuero: 3-0.
Pisó con personalidad el cuadro de Rubén Domínguez el césped del Johan Cruyff y Jerin fue el primero en ensayar el disparo, que se le fue desviado a los cuatro minutos. Los culés, en todo caso, desbordan recursos en su joven conjunto, sobre todo cuando bajan el balón al piso, y Óscar Ureña estrelló un balón en la madera, que casi confunde a Marqueta.
Aún así, siguió atesorando balón en sus pies el elenco ourensano y Álex Gil hizo trabajar a Astralaga en una espectacular estirada del arquero. Olía a gol. Los visitantes eran solidarios en defensa y también sacaban partido de las caídas de Carbonell a la banda izquierda, donde Hugo Sanz progresaba con peligro. Jerin, Fidalgo y Fullana administraban en la línea medular y el mismo Álex Gil volvió a ensayar el chut, que no cogió portería, antes de que los azulgranas sí dieran en la diana.
El árbitro se mostró inapelable poco después ante una mano de Fullana, precedida de un rebote, y Víctor Barberá lo transformó sin opción para el meta el rival.
El gol fue un duro golpe en la línea de flotación de un Ourense CF que estaba mostrándose capaz de sumar y, entonces, Toni Fernández dibujó una pared con el omnipresente Ureña, para sellarla con un remate acrobático que sorprendió a todos.
La delicatesen hizo que se tambaleara el once forastero, que no se amilanó y siguió atacando, pero el goleador Toni contactó con su primo Guillermo, para que este se llevara el tercero de la noche. Los dos juveniles de 16 años, que ya han pasado por los entrenamientos de Hansi Flick en la primera plantilla, dejaron muy mal parado a un oponente que no se había merecido semejante castigo.
Después de intentar levantar los ánimos en la pausa en los vestuarios, los de Rubén Domínguez siguieron realizando un trabajo aseado sobre el césped, pero carecieron de lo que le sobraba a su joven enemigo. No había pegada.
Óscar Ureña parecía empeñado en oscurecer un poco más la noche de los ourensanos, que sin embargo no renunciaban al balón y seguían moviéndolo con criterio, pese a que mirar al marcador era un dolor. El acierto del filial fue una losa pesada y los gallegos no lograban contactar con Di Renzo en la vanguardia y su ocasión más clara fue una buena combinación en esos metros finales, con definición de Fullana y otra parada de buenos reflejos de Astralaga.
El Ourense CF sigue pagando el peaje de su estreno en la Primera Federación y comprendiendo que, además de realizar un buen trabajo, también es necesaria esa chispa que enciende el fútbol. Hay que seguir insistiendo en las próximas semanas.
FC BARCELONA B (3): Astralaga, Fort (Landry, min 71), Olmedo, Andrés Cuenca (Cortés, min 66), Edu Sánchez (Trilli, min 62), Pau Prim, Guille Fernández (Rubén López, min 62), Unai, Toni Fernández (Darvich, min 71), Ureña y Barberá.
OURENSE CF (0): Marqueta, Andrada (Josema, min 60), Moi, Prada (Álex Zalaya, min 71), Hugo Sanz, Fidalgo, Jerin (Del Olmo, min 60), Fullana, Álex Gil (Miguel Prado, min 66), Carbonell (Ángel Sánchez, min 60) y Di Renzo.
GOLES: 1-0, min 30: Barberá, de penalti; 2-0, min 41: Toni Fernández; 3-0, min 45: Guille Fernández.
ÁRBITRO: Ortega Herrera, del comité valenciano. Muy protestado en la jugada del penalti que abrió la cuenta de los locales, en la jornada de Primera Federación en el Johan Cruyff.