Paco Sotelo, presidente del Velle: «En clubes de fútbol modesto no hay título de presidente, toca hacer de todo»

OURENSE

Paco siempre encuentra algo que hacer en algún rincón del Monte da Aira
Paco siempre encuentra algo que hacer en algún rincón del Monte da Aira ALEJANDRO CAMBA

El directivo ourensano jugó al fútbol de niño, fue entrenador e incluso recoge balones si es necesario

07 oct 2024 . Actualizado a las 05:00 h.

A Francisco Sotelo Salgado (Ourense, 1967) le cuesta identificarse con la figura de un dirigente de un club de fútbol. Sabe que en las competiciones modestas el deporte va más allá y cree que es uno más de esos moradores de Velle que colabora en lo que puede.

«Por mucha energía o ganas que tenga a veces, sí que llegas a pensar que en un pueblo con 700 habitantes debería tener un relevo más continuo. Yo trabajo en el Fogar do Transeúnte y como tengo más tiempo libre en unos horarios concretos, voy ya por el tercer año al frente del club. También fui presidente de la asociación de vecinos y, en cuatro o cinco de los últimos doce años, he sido el responsable de la comisión de fiestas», hace balance Paco, desde su atalaya en el campo do Monte da Aira, donde le indica a uno de los chavales en qué dirección localizar un balón que se ha salido del recinto.

Con todo, Sotelo es una persona inquieta que observa de modo diáfano cómo arrimar el hombro a sus vecinos, a la vez que disfruta de lo que es una auténtica pasión, el deporte rey: «En clubes como el Velle no hay un título de presidente, toca hacer de doto y eres igual que cualquier otro integrante de la directiva. Aquí he estado muchos años y con diferentes funciones, he jugado, entrenado y he ido a buscar balones al montes, abrir puertas o a buscar socios. Siempre hay algo en lo que trabajar».

Insiste Paco en que lo hace guiado por todo lo que representó el balompié para él desde niño, aunque ciertos golpes de fortuna lo apartaron hacia fuera del campo, a medida que fue dibujando una trayectoria germinada en sus tiempos de escolar: «A finales de los setenta y principios de los ochenta era uno de esos niños que pasaba horas y horas en el campo de Salesianos. En el viejo, de tierra, donde jugamos tantos partidos con aquel ambiente mítico. Entonces pasé a las categorías inferiores del Galaico, pero como vivía en Velle y el club local se había fusionado con el Carrera, me fui para su equipo juvenil».

En ese momento del relato, el actual presidente del club hace un inciso para recordar la figura de Manolo Carrera. «Ese sí que era un tipo fenomenal», dice recordando sus desvelos para que los niños de la época pudieran practicar deporte en la geografía del término municipal.

Eran también tiempos en los que el Club Deportivo Ourense era el faro de todas las categorías en las que estaba representada la provincia y no tardó en vestir también de vermello: «Me llamaron del Atlético Ourense y estuve allí cuatro años, con la suerte de que pude estar una temporada en Preferente y tres en Tercera División, pero una hernia discal le puso punto final a mi corta trayectoria como futbolista».

Paco reconoce que durante algunos años se mantuvo alejado del mundo del fútbol: «Soy de los que hizo el servicio militar y entre eso y la lesión me pasé un tiempo lejos de la competición. Fue hasta que un presidente del Velle, Ismael Rodríguez, me llamó para que echara una mano entrenando a los niños y me hice cargo de un equipo de infantiles. Durante algún tiempo estuve en distintos equipos de la base e incluso llegué al sénior, en la primera temporada de Preferente».

En la vecina localidad de Melias, Sotelo participó de una gesta inesperada en aquellos tiempos: «Fue una época muy intensa, logramos ascender por primera vez a la categoría autonómica y también pudimos mantenernos en una temporada 2007/08 inolvidable».

Aquel éxito lo llevó a integrarse en la estructura del Ourense CF, para pasar después al Vilamarín y de vuelta a Velle: «Todo iba cambiando y me fui apartando también del banquillo. Claro que aquí siempre estaba dispuesto a echar una mano y, en la campaña 22/23, me ha tocado ocupar la vacante en la presidencia».

Fan de sus hijos, la internacional Vanessa y el delantero Rucho

La familia de Paco Sotelo es bien conocida en los círculos del fútbol ourensano y sus hijos no iban a ser menos. Relevante es la figura de Vanessa, internacional laureada con la selección española de fútbol sala, con la que fue campeona de Europa, y durante años una de las mejores goleadoras de la máxima categoría nacional. Afincada en Madrid, acumula ya varios cursos en el Alcorcón y Futsi Atlético.

«Casi siempre hacía mis escapadas a Madrid para verla, aunque últimamente me ha costado más. Eso sí, no fallo casi ninguna de sus visitas a los equipos de Galicia y también he ido varias veces a la Portugal o cuando juega más cerca con la selección. Este año tuvieron problemas con las lesiones en el principio de la liga, pero ella está muy contenta con las sensaciones de las jornadas más recientes», recuerda Paco, quien estaba pendiente en las últimas horas del alta de su hijo Rucho, que sufrió una rotura de tibia y peroné con la camiseta del Melias, club al que regresa tras su paso por el Arnoia y el Escairón: «Siempre va con Iván González, que es el entrenador con el que mejor se entiende».

DNI

Quién es. Francisco Sotelo Salgado (Ourense, 1967) se acercó al fútbol en el campo, entonces de tierra, de Salesianos. De juvenil pasó al club resultante de la fusión entre el Velle y el Carrera y le dedicó gran parte de su vida, alternándolo con su trabajo en el Fogar do Transeúnte.

Su rincón. En el Monte da Aira, Paco ha sido jugador, entrenador, directivo y una de tantas personas con multifunciones en el club.