El obispo de Ourense pide a los sacerdotes que cuiden la fraternidad entre ellos para poder ejercer mejor su ministerio
OURENSE

La reunión de los curas para la concelebración de la misa crismal con el obispo, sirvió para que el clero ourensano rindiera un homenaje a los que cumplían 25, 50, 60 o 70 años de su ordenación
17 abr 2025 . Actualizado a las 05:00 h.El público llenó la catedral de Ourense para asistir a la misa crismal de Semana Santa, una ceremonia en la que se bendicen los óleos que estarán en las parroquias para su uso con enfermos y catecúmenos y que reúne al clero diocesano para renovar sus promesas sacerdotales. Es esta una jornada especial para ellos, que arranca de mañana con un retiro en la iglesia de Santa Eufemia previo a la misa que concelebran con el obispo, y que culminó con un almuerzo de confraternidad. Este año catorce curas ourensanos recibieron un pequeño homenaje por la celebración de aniversarios señalados en su trayectoria. Roberto Álvarez Sánchez y Xosé Roberto González Garza cumplían las bodas de plata; Francisco Gavilanes Fernández, Benito Fernández Ferreiro, Serafín Fernández Rodríguez, Simón Mandianes Lama, Xosé Xulio Rodríguez Fernández y Evaristo Rúa Prieto, las de oro; José de León González, Abel Estévez Blanco, Castro Iglesias Álvarez Alfonso Iglesias Rodríguez, las de platino; y Manuel Carrasco Carrasco y Manuel Lorenzo Argibay, ordenados hace más de 70 años, celebraban las de diamante. Ese homenaje se materializó en un almuerzo de confraternidad que se celebró tras la misa.
El obispo de Ourense, Leonardo Lemos Montanet, habló en su homilía de la belleza de la vocación sacerdotal haciendo hincapié en la grandeza de la entrega que supone estar al servicio de los vecinos y de un ministerio que, dijo, llama a vivir la fraternidad entre los ordenados. «Nos urge ir en busca de los que se han alejado, de los heridos, de los que están o se han situado en las márgenes de la vida diocesana y la fraternidad del ministerio. Es preciso sanar las divisiones personales e internas para poder sanar las de la comunidad», señaló el obispo antes de pedir a los sacerdotes que pongan «mucho amor» y reactiven su fe en cada misa que celebren.