Siete concellos se exponen a perder subvenciones por no rendir cuentas

Miguel Ascón Belver
miguel ascón OURENSE

A POBRA DE TRIVES

Santi M. Amil

Una decena de ayuntamientos incumplió los plazos del Consello de Contas

24 oct 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

El pasado día 15 terminaba el plazo del que disponían los ayuntamientos de toda Galicia para enviar sus resultados económicos del ejercicio 2016 al Consello de Contas. Ese organismo es el encargado de fiscalizar la gestión de las entidades públicas gallegas, pero no siempre lo tiene fácil para cumplir su función. Solo en la provincia de Ourense son siete los concellos que no han rendido cuentas todavía, motivo por el cual se exponen a no recibir subvenciones de la Xunta de Galicia.

Los ayuntamientos que mantienen sus resultados económicos al margen del control del Consello de Contas después de haber concluido el plazo establecido para comunicarlos son Castro Caldelas, Cortegada, Maside, Melón, Nogueira de Ramuín, A Pobra de Trives y Verín. Cabe destacar, no obstante, que hubo más concellos en la provincia que tampoco rindieron cuentas antes del día 15, pero que ya lo han hecho en las últimas jornadas. Pese al retraso, el Consello de Contas las analizará de todos modos, con la única pega de figurar bajo el epígrafe de «con defectos». En esa situación concreta se encuentran este año los ayuntamientos de Beariz, A Peroxa y Rairiz de Veiga.

El resto de los concellos de la provincia sí han cumplido con los plazos establecidos para rendir cuentas. Algunos lo hicieron con extraordinaria diligencia, como ocurre con O Bolo, Calvos de Randín, Pereiro de Aguiar o Trasmiras, que remitieron sus datos al Consello de Contas el pasado mes de mayo. Son excepciones puesto que la mayor parte de los ayuntamientos exprimen los tiempos al máximo. De hecho, la mitad de los concellos de la provincia (46, concretamente) rindieron cuentas en los primeros quince días de octubre, es decir, justo antes de que se consumiese el plazo marcado.

Consecuencias

Más tarde o más temprano, el caso es que de los 92 concellos ourensanos solo quedan siete por cumplir con sus obligaciones ante el Consello de Contas. Esos ayuntamientos se exponen a no recibir subvenciones de la Xunta de Galicia. El gobierno autonómico, presidido ya entonces por Alberto Núñez Feijoo, aprobó a finales del año 2011 un decreto que obliga a los ayuntamientos a someterse a la fiscalización de ese organismo. En el caso de no hacerlo, según se acordó, no pueden solicitar subvenciones de la Xunta o, más bien, pueden hacerlo, pero les serán denegadas. Se buscaba, de ese modo, garantizar la transparencia y el control de las actividades económicas de todos los ayuntamientos. A raíz de comenzar a aplicar esas medidas, el número de concellos que incumplen sus obligaciones con el Consello de Contas se ha reducido considerablemente en los últimos años. En el 2009, por poner un ejemplo, 56 de los 92 ayuntamientos de la provincia ourensana rindieron cuentas fuera del plazo establecido.

La capital ourensana cumple con sus obligaciones por primera vez desde que existen registros

El Ayuntamiento de Ourense remitió al Consello de Contas sus resultados económicos del ejercicio 2016 el pasado día 26 de septiembre. Cumplió, por lo tanto, con el límite del 15 de octubre y ello supone toda una novedad en las relaciones del Concello ourensano con el órgano encargado de fiscalizar su gestión. Desde el año 2010, el primero del que se publican datos, el Ayuntamiento envió siempre sus cuentas con retraso sobre los plazos fijados para ello.

Cabe destacar, no obstante, que el Consello de Contas ha encontrado defectos en la documentación recibida desde la capital ourensana. Se trata de deficiencias que califica como «leves» y que están relacionadas con el incumplimiento de plazos en la tramitación de la cuenta (no en el envío) así como «descadres internos dos estados contables e erros de coherencia interna das propias contas rendidas».

Cumplidores e incumplidores

Otro de los concellos que es habitual que se retrase en el cumplimiento de sus obligaciones con el Consello de Contas es el de Xinzo de Limia. Sin embargo, este año sí ha remitido la documentación a tiempo (concretamente el 4 de julio). El que no corrige su modo de relacionarse con el órgano encargado de fiscalizar la actividad económica de las entidades públicas gallegas es el Ayuntamiento de Verín. El Concello verinense aún no ha remitido sus resultados del ejercicio 2016 y los del 2015 los envió el pasado mes de julio, nueve meses después de finalizar el plazo.