Lo acusan de robar dos neveras de una comisión de fiestas de Coles que acabaron destrozadas en un punto limpio y él alega que «estaban abandonadas»

Visto para sentencia quedó este martes en la sala de vistas del Juzgado de lo Penal dos de Ourense el caso contra un hombre al que se atribuye un delito de hurto. Se sospecha que en agosto del año 2023 se llevó dos de las tres neveras que la comisión de fiestas de una parroquia de Coles tenía colocadas para sus celebraciones, pero el acusado no acudió a la vista. Eso sí, a petición de la fiscala se leyó la declaración que prestó en instrucción, cuando admitió los hechos, aunque justificándolos. Así, dijo entonces que creía que los frigoríficos «estaban abandonados» y que por eso los recogió.

Pero varios testigos negaron ese estado. Una de las integrantes de la comisión aseguró que un distribuidor les había dejado tres neveras en el campo de la fiesta, enterándose horas después de que dos de ellas habían desaparecido. Un testigo corroboró esto último ya que él mismo presenció como un individuo cargaba los aparatos en un remolque y se los llevaba. «Me dijo que se los habían vendido», recordó sobre la respuesta que le dio el sospechoso cuando le preguntó la razón por la que los transportaba.

Pero en el juicio no se presentaron pruebas de que alguien hubiese autorizado al traslado de los frigoríficos. El distribuidor de bebidas que las llevó al lugar de la fiesta negó tener relación con el acusado y reclama 1.500 euros. Y es que nunca recuperó lo que era suyo. Unos días después del hurto, las neveras aparecieron destrozadas en el punto limpio de A Peroxa. Dos agentes de la Guardia Civil aseguraron que les habían quitado el motor y las habían despiezado. La Fiscalía ve en lo ocurrido un delito de hurto y pide 10 meses de cárcel.

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