Diana Ramos, técnica de turismo: «A Valdeorras faltáballe estima turística, saber todo o bo que temos»

María Cobas Vázquez
maría cobas O BARCO / LA VOZ

O BARCO DE VALDEORRAS

Diana Ramos es la responsable del punto de información turística de O Barco.
Diana Ramos es la responsable del punto de información turística de O Barco. LOLITA VAZQUEZ

La profesional cree que la pandemia ayudó a cambiar la percepción sobre la zona

04 jul 2021 . Actualizado a las 23:36 h.

Desde hace poco más de dos meses, O Barco de Valdeorras cuenta con un punto de dinamización turística y de información sobre productos tradicionales. No es una oficina de turismo al uso, recalca su responsable, Diana Ramos, y de ahí que el horario tampoco lo sea. No abre los fines de semana. Y tampoco tiene la ubicación más habitual. La oficina está en la plaza de abastos. En un puesto más del mercado, Diana no vende nada en concreto. Lo vende todo.

Su objetivo es que el turista venga a O Barco y se quede varios días descubriendo Valdeorras. Disfrutando de los enclaves con más encanto, y también de la gastronomía y, por supuesto, de los vinos. «Non somos unha oficina comarcal, pero traballamos un pouco como iso, porque eu cando vén alguén pedir información, fálolle de todo o que hai na zona», señala. La técnica de turismo cree que ir unidos es el camino para conseguir hacer despegar Valdeorras como destino turístico. «Eu a quen vén dígolle que vaia ao miradoiro de Alixo, que pasee polo Malecón e que visite O Castro; pero tamén lle falo de que aquí ao lado en Rubiá está o parque natural da Serra da Lastra, ou do castelo do Bolo», explica. Porque es consciente de que O Barco como destino único no funciona, sino que hay que darle una oferta más amplia a quien llegue.

Su trabajo es ofrecer información y también tratar de crear sinergias en el sector. «Nós non creamos produtos nin paquetes, senón que o que se busca é coñecer ao sector, detectar necesidades e crear sinerxias», avanza. Una de las primeras cosas que hizo fue crear una base de datos actualizada para saber dónde se puede comer o dormir. ¿Qué le falta a Valdeorras para acabar de despegar como destino turístico? «Igual ter un tecido. Faltan prazas hoteleiras, iniciativas privadas que ofrezan experiencias diferentes... E tamén nese sentido imos intentar axudar dando formación para que os posibles emprendedores analicen o que queren facer», señala. En todo caso, cree que hay un cambio de tendencia en lo que venía pasando hasta ahora: «A estima turística vai medrando, hai un cambio. Era algo que faltaba, si, faltaba estima turística en Valdeorras, saber todo o bo que temos; e coa pandemia moita xente aprendeu a apreciar o que hai aquí. Agora a xente aposta máis por natureza, paisaxe, destinos non masificados... E todo iso témolo».

De hecho, dice que eso es lo que más valoran los que vienen. Llegan sobre todo de la Rioja alavesa, Asturias, Galicia y León, y también de Madrid y Alicante. Reconoce que disfruta escuchando a los foráneos valorar el territorio. «Gústame o contacto coa xente, e gozo cando chegan alucinando polo que viron. Xente que se emociona co Malecón ou cos viños da D.O. Valdeorras», cita. Y recuerda entonces un caso especial: «Veu un enxeñeiro alemán que me dixo que o tramo do Camiño entre Ponferrada e O Barco era do máis bonito que teñen visto os seus ollos. E falamos dunha persoa que estivera en Tailandia ou Canadá facendo sendeirismo. ¡Eses ollos tiñan visto moito!».

Destaca también la técnica de turismo el potencial del Camiño de Inverno. «Ten un papel crucial no desenvolvemento turístico da zona, e ao tempo complementario. Aquí a aposta é río, viño e natureza, como paisaxe e como deporte, porque podes vir pasear polo monte ou facer piragüismo», señala. En todo caso, cree que hay que apostar por el turismo slow. «Queremos ofrecer un de excelencia; non exclusivamente caro, pero si de autor, non precario».

Le encanta su trabajo, no lo esconde, y cree en las potenciales de Valdeorras para convertirse en un destino apreciado para pasar las vacaciones en cualquier momento del año.

Disfrutar con sus hijos en los rincones de su infancia

Tras rematar la carrera, Diana Ramos dio el salto al mundo laboral en Madrid. Trabajó en varias agencias de comunicación, en muchos casos con clientes dedicados al turismo y a la gastronomía. Tiempo después regresó a Valdeorras para convertirse en la locutora de Radio Voz. La vida la llevó posteriormente a Vigo para acabar en Santiago dando un nuevo giro a su trayectoria y encargarse de comunicación política. Y ahora está de vuelta en su tierra natal como técnica de turismo. «É un pouco volver aos comezos, porque nas axencias de Madrid xa traballei co sector», señala.

Vuelve con su marido y sus dos hijos, así que está feliz de poder pasear con ellos a diario por los rincones de su infancia. Le gusta el Malecón para caminar, tomar algo en una terraza o que los niños jueguen en el parque; pero sin duda su rincón favorito es la pincheira de Fervenza, la aldea de sus abuelos y en los que pasó grandes días de juegos en su infancia. Ahora los vuelve a pasar, ya en compañía de su propia familia.

Quién es

DNI. Diana Rodríguez Ramos nació en O Barco de Valdeorras en 1981.

Formación. Estudió Periodismo en la Universidad Complutense de Madrid, y Diseño Gráfico en el CEV, la Escuela Superior de Comunicación, Imagen y Sonido de Madrid.

De vuelta. Tras una etapa trabajando en Madrid regresó a Valdeorras. Después estuvo en Vigo y Santiago y ahora vuelve a casa.