El fuego de O Barco amenaza el pueblo de Santa Mariña tras quemar 15 casas en Alixo

María Cobas Vázquez
María Cobas O BARCO

O BARCO DE VALDEORRAS

Alrededor de doscientos vecinos de seis núcleos han sido desalojados en Valdeorras. Sigue la evolución de los incendios

18 jul 2022 . Actualizado a las 18:54 h.

El incendio forestal iniciado el jueves en Riodolas, en el concello ourensano de Carballeda de Valdeorras, continúa avanzando por O Barco. Las fuerzas de seguridad están recomendando a los vecinos de Santa Mariña que desalojen sus casas. El fuego está cerca y preocupa que las llamas acaben entrando a la aldea. «Non estamos obrigando á xente a marchar, pero si que o recomendamos porque hai risco», explica el delegado de la Xunta en Ourense, Gabriel Alén, que lleva desde anoche en el puesto de mando habilitado en la Casa Grande de Viloira al que también se desplazó el conselleiro de Medio Rural, José González, y el director xeral de Emerxencias, Santiago Villanueva. Puntualiza que, al menos a las ocho de la mañana, la situación no es de riesgo extremo como el vivido de noche de Santigoso y Alixo, que se ha convertido en el pueblo más afectado por el gran incendio forestal. «Han ardido quince casas», apunta el alcalde, Alfredo García. «El resto de bienes afectados ni los hemos contado de momento», explica mientras se dirige a Santa Mariña junto al teniente de alcalde, Tino Alonso. Cuenta que la noche fue más tranquila de lo esperado a última hora del domingo. Entonces García hablaba de que se sería dura al no poder trabajar los medios aéreos. Fue una noche de intenso trabajo para evitar que el fuego entrase en Santigoso. «En principio está tranquilo. Se abrieron pistas y se controló. El resto de pueblos, salvo cambio de viento, están liberados. Ahora preocupa Santa Mariña», añade García. La amenaza llega por la parte baja de la aldea, después de que el fuego procedente del norte tirase cogiese dirección hacia el monte.

No hay datos concretos de cuántas personas han sido desalojadas por causa del gran fuego que anoche había arrasado ya 2.400 hectáreas. «Estimamos que unhas duascentas persoas, pero é moi difícil sabelo porque hai quen marcha polo seu propio pé, e a outros baixámolos», añadía Alén. El Concello de O Barco hablitó el teatro Lauro Olmo para acoger a aquellos vecinos que no tuviesen donde alojarse, pero nadie utilizó ese recurso ya que fueron encontrando acomodo en casas de familias y amigos. Hay quien bajó a su vivienda en el casco urbano. Desde los concellos vecinos de A Veiga y Vilamartín de Valdeorras contactaron con O Barco para poner a disposición del Concello sus albergues por si los necesitaban para dar un recurso habitacional de urgencia a los afectados por los desalojos. Y también la regidora de A Pobra de Trives brindó su ayuda.

Hasta el momento, el incendio de Riodolas ha afectado a once núcleos de población, todos ellos muy diseminados. En seis han sido evacuados los vecinos. Son Domiz y Candeda, en Carballeda de Valdeorras; y Alixo, Vilariño, Soulecín y Santa Mariña en O Barco.

Tampoco hay, a estas horas, datos sobre superficie ardida. «Agora no que nos estamos centrando é na xente e nas aldeas», añade Alén desde el puesto de mando. En todo caso, las estimaciones hablan de que solo durante el domingo el fuego consumió unas 1.600 hectáreas de terreno. El último dato oficial, de anoche, situaba en 2.400 las afectadas.

Oímbra

Por otro lado continúan activos los dos incendios que entraron este fin de semana en el municipio ourensano de Oímbra desde Portugal y que generaron preocupación por la proximidad de las llamas a dos núcleos de población. Uno es el de Videferre, que entró por Montalegre, y el otro, que afecta a San Cibrao, llegó por Vilarello da Raia. La Xunta activó el domingo la Situación 2 de emergencia, pero ya está desactivada esa medida preventiva. «Houbo que desaloxar algunha casa por precaución, pero afortunadamente o lume non alcanzou ningunha», afirma la alcaldesa de Oímbra, Ana Villarino. La regidora asegura que no fue necesario proceder al desalojo completo de ninguno de los dos núcleos rurales y que solo abandonaron sus viviendas algunos vecinos.

«Logo dunha noite moi difícil, nestos momentos a situación está calmada. Estase controlando o lume para que non se volva reproducir», asegura la regidora. La intervención de medios aéreos en la extinción de las llamas impidió, según apuntaron desde el Concello, que ardieran dos casas situadas justo en la frontera. La superficie afectada por el fuego en Videferre alcanza ya las 350 hectáreas mientras que en San Cibrao se consumieron, según los últimos datos de la Xunta, 20.

A primera hora de la tarde era necesario solicitar, como medida preventiva, la situación 2 en otro incendio de Oímbra, concretamente por la proximidad de las llamas a los núcleos de Rabal y Mandín. El fuego entró también desde Portugal.

Más de 1.000 hectáreas

En la parroquia de Padroalbar, en Vilariño de Conso, sigue activo el incendio que se inició el viernes y que afecta al parque natural de O Invernadoiro. Las llamas han consumido 1.800 hectáreas. Desde la Brif de Laza, que participa en las labores de extinción, apuntan a que se trata de una zona de difícil acceso y sin cortafuegos, lo que sumado al viento dificulta el control del fuego.

Controlado en Ribadavia

Y todavía no se ha extinguido el incendio de Ribadavia, que afecta a 65 hectáreas. Los equipos de emergencia consiguieron controlar las llamas este sábado, después de cinco días de trabajo.