Sale a la luz la historia del Castro de Trelle, un yacimiento monumental con fama fuera de Galicia

Uxía Carrera Fernández
UXÍA CARRERA OURENSE / LA VOZ

TOÉN

Castro de Trelle en una fotografía aérea del vuelo americano de 1946<br /> <br /> <br />
Castro de Trelle en una fotografía aérea del vuelo americano de 1946
 
 
cedida

La asociación Porta da Cadea y Amigos do Patrimonio de Toén publicaron una investigación y en julio harán una excavación con el apoyo de los vecinos

11 may 2024 . Actualizado a las 05:00 h.

Investigadores y vecinos llevan meses trabajando en un proyecto altruista para descubrir la historia del Castro de Trelle, que confluye en los concellos de Cartelle, Toén y Barbadás. La primera parte del plan ya dio sus frutos con la primera publicación sobre el yacimiento, de la que solo había un inventario de Florentino Cuevillas de 1928. Casi un siglo después, el libro será la antesala para la excavación que realizarán en julio. 

David Sabucedo, uno de los autores, el investigador Juan Carlos Forneiro y el arqueólogo Benito Vilas presentarán la publicación este sábado a las 20.00 horas en el Parque do Fidalguiño de Sobrado do Bispo. «Historia, tradición e futuro» es el título del libro que recopila la documentación sobre el Castro de Trelle, desde la Edad Media hasta la actualidad, y la complementa con tradición oral de los vecinos de las parroquias próximas. Corrió a cargo de la asociación Porta da Cadea y Amigos do Patrimonio de Toén.

El yacimiento se recoge por primera vez en el año 1928 en el inventario de Florentino Cuevillas hizo de los castros de la comarca de Celanova, cuando realizó una pequeña visita y alguna cata. Además, tamién recogió algo de la tradición oral del momento, como explica David Sabucedo. No es hasta los años 70 cuando aparece de nuevo algún estudio sobre el castro, cuando se hizo una pista de uso militar. «Houbo algunha intervención case furtiva dun par de eruditos que traballaban no psiquiátrico de Toéon e atoparon pezas, como pedras de afiar ou fusaiolas», cuenta Pousada. 

Para la nueva publicación, recopilaron estas informaciones además de lo que pudieron encontrar por internet o de pequeños trabajos que fueron juntando a lo largo de los años. Los datos más novedosos fueron los que les aportó la tradición oral. «É un castro sorprendente porque a súa fama se expandía fóra de Galicia», asegura el autor. Cuevillas ya había recogido en su inventario en un hombre de Pereira de Montes contaba que cuando iba a la siega a Castilla se hablaba mucho del castro por la gran riqueza de oro que tenía. En este 2024, se volvió a producir la misma anécdota actualizada a los nuevos tiempos: ««Un veciño de Trelle contounos que estaba ca súa nai nun hostpial de Madrid e comezou unha gran tormenta, unha muller de Valencia que estaba na habitación dixo 'que Dios se la lleve para el Castro de Trelle'». Pousada aclara que la comarca siempre tuvo una gran tradición de ir a la siega a Castilla y así expandieron la existencia del yacimiento. 

Entre los habitantes más veteranos de los concellos próximos al castro se conocen además leyendas típicas de moros, que incluso recogió Camilo José Cela, u otras más particulares como que un gigante habitada el yacimiento. 

Así era el castro

El Castro de Trelle se expande por unas dos hectáreas y media en tres comunidades de montes. Dos cuartas partes se asientan en la de Sobrado de Montes. Sobre la fecha del asentamiento, David Sabucedo todavía no se atreve a fijar una concreta y adelante que se sabrá cuando se realice la excavación. Los arqueólogos estiman que estuvo activo desde el siglo I a.C. y el II d.C. Es un yacimiento «monumental» de un tamaño grande y con varias zonas más complejas. Se divide en la corona, en la que aparecieron cabañas circulares, otro recinto un poco mayor y varias 

Está en un punto privilegiado para el control porque se asienta en un alto desde el que se puede observar el sur de la provincia de Ourense e incluso Portugal. Por eso, en los años 70 se construyó una torre de vigilancia contra los incendios, ya desaparecida. Actualmente su conservación está bastante alterada porque la construcción de la pista rompió parte de las murallas. 

Las dos asociaciones implicadas en la investigación del castro empiezan a saldar una cuenta pendiente de la comarca para conocer al fin el patrimonio del castro. Los vecinos están colaborando con el proyecto porque es necesario que sea a largo plazo. «Co patrimono, se non fas que a xente se implique non sirve de nada. Aínda que agora fagas unha excavación se nuns anos se vai abandonar, pérdese», defiende Sabucedo.