Amenazó a los agentes que querían parar una fiesta ilegal en Verín: «Ya nos venís a joder»

La Voz OURENSE / LA VOZ

VERÍN

Juzgado de Ourense
Juzgado de Ourense M. Fernández

Los hechos ocurrieron cuando estaban limitadas las reuniones de no convivientes y aún estaba vigente el toque de queda

05 jul 2022 . Actualizado a las 05:00 h.

Aunque las restricciones de movilidad y horarios que se impusieron por la pandemia del covid-19 ya son historia, a los tribunales siguen llegando algunas de las denuncias que se interpusieron contra quienes no respetaron aquellas limitaciones. Es lo que ocurrió este lunes en la sala de vistas del Juzgado Penal 1 de Ourense. Allí se juzgó a un hombre que se enfrentó a los agentes de la Guardia Civil que acudieron a su domicilio de Queizás (Verín), tras haber sido alertados sobre la posible celebración de una fiesta, algo en aquellas fechas era ilegal ya que había toque de queda y estaban limitadas las reuniones de no convivientes.

El incidente ocurrió a las cinco y media de la madrugada del 27 de octubre del 2020. Los agentes llamaron a la puerta de la casa y se encontraron con numerosas personas dentro. Enseguida les solicitaron que se identificasen y que abandonaran el lugar para regresar a sus domicilios, si bien en ese momento uno de los participantes en el encuentro social no solo se habría mostrado reacio a confirmar su identidad, sino que llegó a amenazar a los dos funcionarios del instituto armado. «Ya nos venís a joder la fiesta», le espetó Iván S. P. a uno de los agentes, comenzando luego a insultarlo tanto a él como a su compañero. La cosa se puso peor, ya que en medio de la trifulca el sospechoso cogió un cuchillo y amenazó con él a los uniformados, gritándoles que los iba a matar. Luego los participantes en la fiesta echaron fuera de la casa a los funcionarios y cerraron la puerta, por lo que la detención no se pudo efectuar hasta el día siguiente.

Ante la jueza, el acusado reconoció los hechos de los que se le acusaba, por lo que no fue necesaria la celebración del juicio. Tendrá que afrontar una condena de seis meses de prisión como responsable de un delito de amenazas y pagar las costas.