La jueza envía a prisión al detenido en Vilardevós por intentar matar a un vecino asestándole 23 puñaladas

M. Vázquez / M. Rodríguez OURENSE

VERÍN

El detenido por intentar matar a un vecino en Vilardevós, en el momento en que accedió a  los juzgados de Verín.
El detenido por intentar matar a un vecino en Vilardevós, en el momento en que accedió a los juzgados de Verín. Santi M. Amil

El sospechoso, que negó los hechos, entró en el juzgado de Verín muy alterado y gritando expresiones como «Viva Franco»

15 oct 2025 . Actualizado a las 17:27 h.

La jueza acordó prisión provisional, comunicada y sin fianza para el detenido en Vilardevós por haber agredido, este lunes, a un vecino asestándole 23 puñaladas. El sospechoso pasó a disposición judicial este mediodía en el Juzgado de Instrucción número 1 de Verín y, tras la comparecencia, la titular ha decidido que entre en la cárcel por un delito de homicidio o asesinato en grado de tentativa.

La togada argumenta la decisión de prisión preventiva en que existe peligro de destrucción de pruebas, ya que los agentes de la Guardia Civil aún no han encontrado una navaja que habría sido utilizada por el sospechoso, Pedro R., durante el altercado. Además, la magistrada también esgrime que existe riesgo de fuga, por la alta pena de prisión que conlleva el delito por el que se le investiga. Por último ve posibilidades de que el sospechoso vuelva a reincidir en el delito, según ha informado el TSXG. La acusación pública había solicitado prisión provisional para el detenido, incidiendo en el riesgo de fuga y de destrucción de pruebas.

El detenido, que accedió la sede judicial de Verín muy alterado y gritando expresiones como «Viva Franco», no hizo caso a las recomendaciones de su abogada de no declarar y accedió a contestar a las preguntas que le formularon las partes. Eso sí, negó los hechos. Dijo que cuando fue a casa de la víctima se lo encontró sangrando y que fue él quien alertó a los servicios sanitarios.

Desde el TSXG han precisado que ahora continúa la instrucción del caso y que el juzgado solicitará más diligencias de investigación. Los agentes de la Guardia Civil siguen recabando datos. Se confirma que entre la víctima y el agresor había una deuda, ya que el perjudicado le había prestado tiempo atrás al detenido una cantidad que ronda los 200 euros. En un principio se pensó que era al revés, y que era el herido el que le debía dinero al agresor. La víctima, que llegó al hospital con el cuchillo aún clavado en su brazo, sufre problemas respiratorios. Su estado sigue siendo grave, pero evoluciona favorablemente de las lesiones y no se teme por su vida.