Augas de Galicia blindará la red de Vilagarcía contra las algas

La Voz LA VOZ | VILAGARCÍA

PONTEVEDRA

RAMÓN LEIRO

La implantación de filtros de carbono activo costará 524.000 euros El principal objetivo de la intervención es evitar la presencia de microcistinas en el abastecimiento

25 dic 2006 . Actualizado a las 06:00 h.

?a contaminación del Umia a raíz del incendio de la planta de Brenntag acabó desvelando, el pasado otoño, otro más de los problemas que padece el embalse de Caldas: la presencia de microcistinas, un alga tóxica, en niveles superiores a los permitidos en el abastecimiento de agua potable. Tras una enconada polémica, que incluyó la recomendación de no consumir el líquido elemento durante varias horas, el Concello de Vilagarcía ha dado el paso previo imprescindible para blindar su agua de este tipo de incertidumbres. La empresa concesionaria del servicio, Espina y Delfín, acaba de presupuestar la implantación de filtros de carbono activo en la planta depuradora de Trabanca Badiña en 524.522 euros. Y el gobierno local ha remitido ya el estudio económico a Augas de Galicia, con el objetivo de que el departamento autonómico asuma la financiación, licitación y ejecución de los trabajos precisos. Los filtros de carbón activo, informa el Concello, tienen como objetivo eliminar las microcistinas en el agua destinada al consumo humano. En este caso, la que se distribuye a través de la red municipal de abastecimiento. En el pleno de octubre, recuerda Ravella, el gobierno local ya había anunciado su intención de gestionar ante la Xunta la instalación de un sistema de estas características en la planta potabilizadora de Trabanca. La microcistina es, básicamente, un alga tóxica que puede aparecer en aguas estancadas. Después del vertido de sustancias químicas desencadenado por Brenntag, y después de que el embalse de Caldas se cerrase para evitar la llegada de la mancha contaminante a las captaciones de los municipios de O Salnés en el Umia, su presencia fue detectada en niveles más altos de lo permitido. Unas instalaciones nuevas Ahora, las obras detalladas por la compañía concesionaria del abastecimiento vilagarciano incluyen la construcción de unas nuevas instalaciones. El futuro complejo albergará todo el sistema de depuración, consistente en los mencionados filtros, depósitos de agua para las diferentes fases del proceso de tratamiento, bombeos, la adecuación del sistema de cloración y la instalación de las conducciones correspondientes. El plazo de ejecución de las obras es de cinco meses. Al margen de esta intervención, Augas de Galicia ha comprometido ya la mejora de la red primaria de abastecimiento. Los trabajos previos consistirán en la instalación de una nueva tubería de impulsión desde el bombeo de Baión hasta As Carolinas. Esta actuación permitirá incrementar el volumen de agua enviado a la red. Pero el gran reto es la creación de un nuevo sistema de captación en el Ulla, mediante la instalación de 7,5 kilómetros de entubados entre Bamio y Valga. La Xunta asume, en este caso, el 60% del coste del proyecto, que supera los tres millones de euros. La parte municipal será librada por Espina y Delfín. A cambio, la corporación prorrogó su concesión en veinte años.