El Barça recupera el factor cancha y pone un pie en la Final Four

Ricardo Mollineli

PONTEVEDRA

31 mar 2010 . Actualizado a las 02:00 h.

El Barcelona de un Juan Carlos Navarro en estado puro, lanzó un órdago en Vistalegre, lo ganó, puso la eliminatoria de cuartos de final de la Euroliga de su lado e hizo reserva de billetes para la final entre cuatro de París, aunque tendrá que refrendarlos mañana de nuevo en el coso madridista, donde podría dejar sentenciado el cruce.

Espeso, sin ideas, tenso. Así comenzó el partido para los dos equipos, sabedores de la importancia del resultado. El Barcelona, que pudo llegar a Vistalegre tocado tras la victoria madridista en el Palau, resolvió rápidamente sus dudas gracias a un Juan Carlos Navarro letal.

Tras el escarceo inicial, protagonizado por Tomic y Navarro, los azulgranas consiguieron un parcial de 0-13 en menos de tres minutos que dinamitó el partido y traslado la presión a los locales, que se veían impotentes de frenar el caudal de juego del Barcelona.

Ettore Messina se desesperaba en cambios constantes intentando buscar un quinteto competitivo y que frenara la sangría de puntos en el marcador. El 14-25 del final del primer período fue bastante elocuente.

Messina siguió sin encontrar un cinco que pudiera hacer algo y el Barcelona dobló al Real Madrid, 23-46, a los 17 minutos de partido. Aquello pareció visto para sentencia, pero la vergüenza torera del equipo local le hizo salir del coma en el que se encontraba y consiguió marcharse a los vestuarios malherido y medio muerto, 31-46, algo impensable unos instantes antes tras un parcial de 8-0.

El Madrid remó y remó contracorriente, con un gran Tomic, defendiendo al límite de sus fuerzas y del reglamento sin obtener demasiado premio, apenas una victoria parcial de 19-15 y entrar en los diez minutos finales con once de desventaja, 50-61.

Pero el Barça siguió sin perder los nervios, respondiendo con un triple en los momentos clave. El aplomo y seguridad de los barcelonistas les permitió ganar el partido, recuperar el factor cancha (2-1 en la eliminatoria) y acercarse un poco más a la Final Four de París.