Louro requiere a la ONCE para que ejecute el convenio firmado en el 2006

Serxio Barral Álvarez
Serxio Barral PONTEVEDRA / LA VOZ

PONTEVEDRA

La organización prácticamente no ha cumplido ninguna de las condiciones

09 ene 2015 . Actualizado a las 05:00 h.

Lo anunció hace poco más de un mes y ahora lo ejecutará. El teniente de alcalde responsable de Urbanismo, Antón Louro (PSOE), dirigirá la próxima semana un requerimiento a la ONCE exigiendo el cumplimiento del acuerdo urbanístico firmado con el Concello de Pontevedra en el año 2006. Al menos, Louro espera obtener de la ONCE un compromiso en firme para ejecutar la urbanización de los terrenos adyacentes a su centro Santiago Apóstol, lo que permitiría una conexión directa de la calle Luis Braille con la avenida de Vigo, facilitando así los accesos al IES Torrente Ballester.

Louro señaló ayer que el Concello no puede quedarse de brazos cruzados mientras la ONCE incumple reiteradamente los compromisos adquiridos en el 2006. Entonces, el Concello se comprometió a recalificar parte de los terrenos de la organización en Campolongo para edificar más de 200 viviendas y a ceder un terreno municipal en el polígono de A Eiriña donde la ONCE tendría que ejecutar una inversión que se cifró en 3,4 millones de euros para construir un nuevo centro de recursos educativos que daría servicio a todo el noroeste de España e incluiría un aparcamiento público.

Además de esa inversión, la ONCE se comprometía a ceder al Concello su antigua residencia y 29.000 metros cuadrados de su parcela en Campolongo para uso público, y a ejecutar la citada urbanización.

La parte municipal se ejecutó ya en el 2008 con la recalificación de los terrenos, mientras que en el 2011 se formalizó la permuta de la parcela en A Eiriña por la antigua residencia.

Sin embargo, la ONCE no ha cumplido los acuerdos. Únicamente cedió al Concello la residencia, en un estado tan de abandono que fue necesario una inyección de más de 200.000 euros para acondicionarla como «centro cívico».

Connivencia del BNG

Precisamente, la decisión del ala nacionalista del gobierno local de aceptar esta cesión e invertir en el citado edificio provocó el enfado del grupo socialista., Louro acusó ayer a sus socios de gobierno de actuar «en connivencia» con la ONCE en lugar de defender «os intereses de Pontevedra».

El requerimiento que se enviará la próxima semana instará a la ONCE a ejecutar el convenio. Y de no ser así, Louro está dispuesto a romperlo y recuperar la titularidad de la parcela del polígono de A Eiriña. Esto probablemente provocaría un embrollo legal, ya que el Concello tendría que devolver a la ONCE el edificio de la antigua residencia, por lo que podría exigir a la organización de ciegos el reembolso de las obras acometidas en el mismo. Además está por ver qué sucedería con las asociaciones y entidades vecinales a las que se ha cedido el uso del inmueble.