Pontevedra se echó a la calle para exigir la adopción de medidas contra el cambio climático
28 sep 2019 . Actualizado a las 20:45 h.Pontevedra se sumó ayer al grito del planeta por el clima. Lo hizo desde las Administraciones - Concello y Diputación convocaron sendos actos-, desde la enseñanza -con una concentración a mediodía- y desde la sociedad civil -con una manifestación que cerró la jornada-.
«Nós, toda a xuventude aquí presente, non imos permitir que destrúan o noso medio de vida, o noso planeta, o noso fogar». Fue el mensaje que trasladaron dos alumnos de 2º de bachillerato del IES Luis Seoane en la concentración que las Escolas da Unesco organizaron en la plaza de A Peregrina a mediodía. Fue una convocatoria que quedó algo deslucida por la lluvia, ya que hubo colegios que finalmente decidieron no participar, pero que aun así demostró que la fuerza de los jóvenes es una de las mayores esperanzas para recuperar un planeta herido. Porque el manifiesto se cerró con un mensaje muy claro: «Compañeiras e compañeiros, a loita segue».
Antes, se había desplegado una pancarta en el balcón de la Casa Consistorial, un acto al que asistieron representantes de todos los partidos políticos presentes en la corporación municipal. Bajo el lema Efecto PO2, el Concello quiere llamar la atención de la gravedad de la situación y poner en valor lo que se está aportando desde Pontevedra con medidas como, por ejemplo, la reducción de emisiones ligada a la eliminación de tráfico urbano.
También la Diputación hubo un acto cargado de simbolismo: una concentración que duró exactamente cuatro minutos y quince segundos, «en protesta polo récord de contaminación alcanzado na atmosfera terrestre o pasado mes de abril, cando se chegaron a rexistrar 415 partes por millón de CO2, niveis que non se tiñan producido dende hai tres millóns de anos».
Asimismo, los ecos del grito por el planeta también llegaron a la Subdelegación del Gobierno, donde se registró un escrito demandado actuaciones para paliar la situación de emergencia.
Por último, la jornada se cerró con una manifestación por las calles de Pontevedra que congregó a centenares de personas preocupadas por las consecuencias del cambio climático. En el manifiesto que se leyó al finalizar la movilización se exigió a toda las Administraciones «que asuman a emerxencia climática como un grave problema para o conxunto da sociedade, da biodiversidade e o mantemento da vida»; que se declare elabore una ley que contemple esa emergencia climática; o que en ningún momento se dé por perdida la batalla.
«Entendemos -se dijo en el manifiesto- que é a hora de sumarse a un cambio global de modelo e de paradigma, que os tempo das ambigüidades e das palabras faltas de contido foron superados polas consecuencias e os datos incuestionables que xa todos percibimos no noso día a día».