
Mateo Arias y Carlos Álvarez, convocados con la selección júnior, son dos de los jugadores más jóvenes de la plantilla en esta segunda etapa en Asobal
29 sep 2022 . Actualizado a las 05:00 h.El Cisne tiene muchos diamantes en bruto que pule para sacarles el máximo rendimiento. Por algo es la plantilla más joven de la categoría. Dos de los que más brillan son Mateo Arias y Carlos Álvarez. Son parte de esa cantera que se ha hecho un hueco en el primer equipo y en la selección nacional júnior. Álvarez ya ha ganado medallas con el combinado nacional, pero Mateo acaba de entrar en la primera convocatoria con partidos. «Voy con muchísima ilusión, vamos para disputar dos partidos contra Egipto en Jaén y Granada», explica Arias, que con 20 años está viviendo el año más dulce después de haber debutado hace dos temporadas con el Cisne en Asobal. Entonces, su participación ya despuntaba, pero este año ha sido el de la explosión junto a Carlos Álvarez, de 19 años.
Los dos extremos del Cisne aportan juventud a un equipo que sale al campo «a pasarlo bien, aquí es fácil jugar». «Nos falta experiencia, pero la contrarrestamos con carácter. Ese es el ADN del equipo, lo que nos enseñan desde niños», apunta Arias. Junto a él está Carlos, igual de joven, pero con más bagaje internacional. Este diamante lo sigue puliendo el Cisne, pero a punto estuvo de dar un salto e incorporarse esta temporada al Ademar de León. «Me quedé porque en el Cisne iba a tener más responsabilidad, iba a ser un año importante para mí. La próxima temporada ya veremos, en esta tocaba seguir progresando en Asobal porque hace dos años era todavía juvenil y apenas estuve», subraya Álvarez, que suma ya 19 goles en cuatro partidos. «Los jóvenes aportamos mucho, hacemos un juego alegre y no tenemos la presión que a veces, tienen los más veteranos», añade Carlos.
Estos dos jugadores son el ejemplo del sacrificio y tienen en la experiencia de hombres como Álex Chan, Javier Vázquez, Conde o Franzini el ejemplo de veteranía que quieren seguir. «Intentaremos ayudar a salvarnos de la mejor forma que podamos, en este arranque hemos demostrado que podemos puntuar frente a cualquiera», explica Mateo, que al igual que Carlos Álvarez, reconoce que el cambio de categoría se nota en la portería y en la toma de decisiones de la defensa rival. Cada día es un examen para ellos.
A pesar de la solvencia que muestran la pista, son jóvenes universitarios, que compaginan la élite del balonmano con sus carreras. Mateo se forma para ser maestro de Primaria, mientras Carlos estudia en Vigo Administración y Dirección de empresas. Sus desplazamientos son para jugar, pero también para estudiar en el autobús. Los dos tienen claro que su presente es el balonmano, pero su futuro no estará solo en las pistas.
La mala suerte persigue al Cisne, que pierde a Marko Ojeda por una rotura del ligamento cruzado de la rodilla
Su baja se suma a la de Román Arboleya, Bruno Vázquez, Gualther Furtado e Iván Calvo
No está siendo el mejor comienzo de año para el Cisne. Aunque los resultados sí lo acompañan, las bajas en el equipo se siguen sucediendo. A una plantilla corta y muy joven, se suma ahora la lesión de larga duración de Marko Ojeda. El joven jugador sufre una rotura del ligamento cruzado anterior de la rodilla y se perderá entre seis y ocho meses de la competición, prácticamente puede dar por perdida la temporada. El diagnóstico lo comunicó el club este miércoles. Pierde una pieza más de un puzzle difícil de encajar.
A la baja de Marko Ojeda, se suma la de Román Arboleya, Bruno Vázquez y Gualther Furtado, que todavía no han podido jugar ningún partido esta temporada. Arrastran las lesiones desde la pretemporada. Ya entonces, el entrenador, Javier Vázquez, reconocía la fatalidad de arrancar esta vuelta a Asobal con tantos jugadores en la enfermería. Arboleya tuvo que ser operado antes de que arrancase la liga por una fractura en la falange de un dedo de la mano izquierda. En ese momento se calculó que estaría dos meses y medio de baja, lo que le llevaría hasta mediados de noviembre. En el caso de Bruno, sufre una lesión en la rodilla que, al igual que Román, le tendrá fuera
La situación ha empeorado esta semana con la lesión de Ojeda y la de Iván Calvo, que sufrió un pinchazo en la pierna en el último partido y todavía no se sabe cuál será su evolución.
Marko Ojeda todavía no se había podido estrenar en Asobal. Esperaba su oportunidad, pero ahora tendrá que posponer el debut a cuando se recupere de la lesión.