Rocío Márquez, cantante: «El flamenco es un arte vivo que dialoga permanentemente con su contexto social»

Alfredo López Penide
López Penide PONTEVEDRA / LA VOZ

PONTEVEDRA

PACO RODRÍGUEZ

La gira «Tercer Cielo» de Rocío Márquez y Bronquio recala el próximo 21 de octubre en el Pazo da Cultura dentro del ciclo Voices

06 oct 2023 . Actualizado a las 18:29 h.

«Cada concierto de la gira de Tercer cielo está siendo un verdadero regalo. Nos conecta mucho con el disfrute y creo que eso lo podemos transmitir al público. De modo que, después de pasar el año pasado por Santiago, el Festival Sinsal y Lugo, llegamos a Pontevedra con muchas ganas». Con estas palabras, Rocío Márquez alude al concierto que, junto a Bronquio, ofrecerá el próximo 21 de octubre (20.30 horas) en el Pazo da Cultura en el marco del ciclo Voices.

—Su disco «Tercer cielo» ha sido calificado de transgresor o revolucionario por la crítica especializada. ¿Cómo reciben estos adjetivos?

—La crítica nos ha sorprendido mucho y para bien por todo el reconocimiento que recibimos, primero con el disco y ahora con el directo. Es cierto que intuíamos que no sería un proyecto que dejara indiferente, por lo arriesgado de la propuesta. Lo que no sabíamos era cómo sería recibido, y aquí la respuesta nos llena de alegría.

—¿Recuerda el momento en el que se fraguó su colaboración con Bronquio?

—En el 2019 Bronquio hizo un remix de mi tema Empezaron los 40 a propuesta del sello Universal. Luego, como nos gustó mucho el resultado, Bronquio me propuso embarcarnos en algo más ambicioso. Encerrarnos a crear para ver qué podía salir… y terminó saliendo un disco de diecisiete temas.

PACO RODRÍGUEZ

—¿Hay una parte, desconozco si minoritaria o no, en el mundo del flamenco que no lo concibe fuera de lo que es el clasicismo, ¿cómo se convive con esta, por llamarlo de alguna manera, crítica?

—En el ecosistema flamenco conviven diferentes corrientes y cosmovisiones, como en cualquier cultura. Es cierto que en nuestro caso se vive con más intensidad la polaridad tradición-transgresión. Yo vengo de una educación y unos inicios completamente circunscritos al canon flamenco y más adelante he necesitado abrir, expandir, explorar. Esta decisión —y los proyectos nacidos de ella— no la comprende todo el mundo y está bien que así sea. Gracias a que algunas personas no se sienten llamadas por mi propuesta, hay otras que sí conectan y nos devuelven un cariño inmenso.

—En todo caso, en su rol como docente, imagino que ha observado una evolución en el flamenco, ¿es así?

—Sí, el flamenco es un arte vivo que dialoga permanentemente con su contexto social, cultural, político, económico. En sus dos siglos de historia, siempre ha estado en evolución. Y ahora, que vivimos tiempos convulsos, pues es completamente coherente que el flamenco responda a este momento histórico con propuestas diversas, disruptivas, por ejemplo en la inclusión de las nuevas tecnologías.

PACO RODRÍGUEZ

—¿Y falta educación para escapar de los tópicos que suelen acompañar a esta música?

—Por supuesto, una mayor cultura musical nos permitiría profundizar mucho más en las propuestas, recibirlas en su contexto, ganar matices de comprensión y no quedarnos en la superficie. Pero más importante aún me parece que legitimemos desde la infancia el acceso a la música como expresión humana básica que nos ayuda a conocernos más a nosotros mismos y a expandir nuestra experiencia de vida tanto creando música como escuchándola.

—En los últimos años, se ha hablado mucho de apropiación cultural, ¿cómo lo percibe?

—Entiendo el debate en cuanto a cuestionamiento de las estructuras capitalista de la industria cultural y al tiempo defiendo la libertad de creación de todos los artistas. De modo que prefiero enfocar la reflexión en cómo funciona el sistema en lugar de criticar o cancelar a un artista en concreto por su obra.