Vuelo directo de París a Pontevedra: las atletas olímpicas regresan a casa

De los seis pontevedreses que acudieron a los Juegos Olímpicos de París, cuatro ya figuran en el libro de honor de la ciudad: Antía Chamosa, Antía Jácome, Carolina García y Teresa Portela. Pablo Crespo también iba a firmarlo este viernes, pero un contratiempo de última hora impidió que lo hiciese, y Tere Abelleira se encontraba trabajando, sin apenas días libres ante el próximo inicio de la liga de fútbol.

Sea como fuere, Pontevedra y su alcalde, Miguel Anxo Fernández Lores, recibieron con honores a las cuatro deportistas que empiezan sus vacaciones. «La cita es la playa», bromeaba Teresa Portela, la veterana en cuanto a número de Juegos disputados, ante la pregunta de si se enfrentarían a más citas profesionales tras la competición de París. Y es que llegan unas merecidos días libres tras el esfuerzo y la vorágine de emociones que supone un evento de tal calibre.

En el caso de Antía Jácome, eran sus segundos Juegos. Al haber vivido solo los de Tokio, la atleta reconocía que estos han «sido increíbles a nivel de poder vivir el sueño con tu familia, con la grada llena de gente animándote, dejándose la voz porque tú consigas tu mejor resultado». Incluso estando un poco más lejos de la Villa Olímpica, notaron «gran diferencia» en sentirse muy arropados.

Para Antía Chamosa, en cambio, eran los primeros. «Llegas allí y es todo muy emocionante», comentaba sonriente, incluso aunque no llegó a competir, «al final la marcha es como mi segunda familia y yo estaba ahí viviéndolo como una niña pequeña». Aunque se quedó «con la espinita» de «no poder estar ahí disfrutándolo con ellos».

Carolina García también debutaba en unos Juegos, pero no se sintió presionada por el foco mediático. «Al contrario, yo sentí que había apoyo por parte de los medios», explicaba, «que nuestro deporte se vea es beneficioso para nosotras, porque no tenemos la suerte como otros deportes de que se conozca todo el año, ojalá fuera así siempre».

«Llegar a unos Juegos Olímpicos es muy complicado», destacaba Portela, «hay que pasar las clasificatorias, llegar a un Mundial y conseguir la plaza». Pero ella hace que parezca fácil, convirtiéndose en la primera mujer española en competir en siete ediciones distintas. Los resultados obtenidos por las pontevedresas fueron notables: Portela se hizo con un diploma en París, junto a García, en K4; Jácome, por su parte, consiguió dos diplomas: cuarto puesto en C1 y sexto en C2. Chamosa, que fue suplente en el relevo mixto de marcha, espera volver a unos Juegos para quitarse esa espinita.

Con la alegría de la experiencia vivida, empiezan ahora el ansiado descanso para disfrutar de la playa y recargar energía para cuando empiece la temporada de competición. Siempre con la mira puesta en Los Ángeles 2028.

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