Luz verde municipal para la apertura de la residencia de mayores de A Eiriña, en Pontevedra

Serxio Barral Álvarez
Serxio Barral PONTEVEDRA / LA VOZ

PONTEVEDRA

La Fundación Amancio Ortega dio por concluidas las obras de la residencia de mayores de A Eiriña el pasado 30 de octubre
La Fundación Amancio Ortega dio por concluidas las obras de la residencia de mayores de A Eiriña el pasado 30 de octubre RAMON LEIRO

Política Social iniciará en breve el proceso de adjudicación de las 120 plazas

12 sep 2025 . Actualizado a las 05:00 h.

Pontevedra podrá incorporar al fin la residencia de mayores de A Eiriña a su parque de infraestructuras sociales. El gobierno local aprobó este jueves la licencia de primera ocupación para este edificio, cuya construcción y dotación asumió la Fundación Amancio Ortega para cedérselo a la Xunta de Galicia, que lo integró en la red de residencias autonómicas —lo que implica que el 100 % de sus plazas son púbicas—, y el pasado mes de julio adjudico su gestión a la unión temporal de empresas (UTE) formada por la asturiana CK Sénior Gestión SL y la madrileña Eurest Colectividades.

La teniente de alcalde, Eva Vilaverde (BNG), dio cuenta del acuerdo del acuerdo adoptado por la Xunta de Goberno Local «en solo nove días —destacó— desde que se recibiu a documentación completa». Añadió que la instalación puede entrar en funcionamiento de inmediato, «xa que soamente require dunha comunicación previa».

Ahora es el turno de la Consellería de Política Social, que tiene «todo listo» para iniciar el proceso de adjudicación de las 120 plazas — 84 en habitaciones dobles y 36 en individuales— en cuanto se reciba la confirmación oficial de la concesión de la licencia, según señalaron fuentes del departamento autonómico.

Para adjudicar las plazas se tira de las listas de espera existentes y por tanto la proximidad geográfica no es un elemento a valorar. Sin embargo, desde Política Social se indica que los posibles usuarios marcan una orden de preferencia y ahí sí juega un factor «dominante» el entorno. Eso sí, se da preferencia a las personas con grado III de dependencia.

El proceso, explicaron desde el departamento autonómico, da diez días a cada usuario para decidir si acepta o no la plaza una vez que se le comunica la concesión provisional. A partir de la aceptación, se programa el ingreso, que será gradual debido a que se trata de usuarios dependientes, nunca entrarán los 120 de golpe. A modo de ejemplo, desde la consellería señalan los casos de Santiago o Lugo, con las residencias financiadas por la Fundación Amancio Ortega ya funcionando, donde el proceso de entrada de usuarios duró un mes aproximadamente.

70 personas contratadas

La UTE que gestionará la residencia pontevedresa inició en julio el proceso de selección de personal, que incluye auxiliares, enfermeras, fisioterapeutas, personal de mantenimiento y atención directa a residentes, entre otros perfiles. En aquel momento ya había unas 70 personas contratadas.

La residencia pontevedresa supuso una inversión de 23 millones de euros sufragados íntegramente por la Fundación Amancio Ortega. Tras dos años de obras en un terreno en el barrio de A Eiriña cedido por el Concello, la Xunta recibió las llaves del inmueble el 30 de octubre del año pasado. Ahí se inició el lento proceso de tramitación de la licencia para poder empezar a funcionar, que se alargó bastante más tiempo del previsto por la Administración autonómica, que contaba con que en este verano habría ya usuarios en la residencia. Posteriormente, esa previsión se fue ajustando y ahora se baraja que la instalación pueda estar al completo hasta de que reate este año.