Plantea que el Concello asuma las reclamaciones de daños de los vecinos y exige que se pongan en marcha los protocolos del Plan de Actuación Municipal ante o Risco de Inundacións
21 dic 2022 . Actualizado a las 12:27 h.El municipio pontevedrés de Caldas de Reis sabe lo que es convivir con inundaciones. Es un problema recurrente e histórico en la villa termal. Ni la construcción del embalse del Umia ni el muro de contención levantado hace décadas fueron la solución definitiva que algunos se cansaron de vender. Las sucesivas inundaciones de este mes de diciembre afectaron a zonas habituales como las calles Carlos García Bayón o Real, pero también a otras que se libraban como la avenida de Doña Urraca en su entronque con la travesía del mismo nombre. El grupo municipal del PP presentó una moción para su debate en el pleno en la que propone varias medidas. Plantean los populares que el Concello asuma las reclamaciones de daños que sean convenientemente acreditados por los afectados por las inundaciones. Y que se realice con urgencia un estudio pormenorizado de soluciones para evitar estos problemas y que, después, se proceda a la contratación de las obras y trabajos necesarios.
También sugiere que mientras que no se solucionen estos problemas, se dé traslado al Ministerio de Transportes y a la Diputación de Pontevedra, como titulares de los viales afectados, para que en episodios de lluvias intensas estén en alerta en esos puntos. Reclama, asimismo, que se pongan en marcha los protocolos establecidos en el Plan de Actuación Municipal ante o Risco de Inundacións (Pamri) y, en base a ese plan, se proceda a la activación de las medidas establecidas ante estos temporales.
El portavoz municipal del PP, Fernando Pérez, sostiene que en algunas calles del casco urbano la situación va a peor a pesar de haberse realizado algunas obras. Cita expresamente el caso de Carlos García Bayón, en el tramo comprendido entre la burga y el lavadero. Dice el concejal que la Xunta exigió la instalación de nuevos colectores para evitar que las aguas fecales aneguen el manantial de agua termal y el balneario Acuña. «Puidemos observar que cada rúa na que o equipo de goberno realizou algunha obra, en lugar de mellorar, a situación é cada vez peor», afirma. Enumera las calles García García Bayón, Real, Fornos o la avenida de Doña Urraca. Esta semana los vecinos de estas vías sufrieron cortes de calles, daños en sus vehículos o establecimientos comerciales e incluso, situaciones de riesgo, subraya el edil. La calle Carlos García Bayón alcanzó más de un metro de altura de agua, mezclándose fecales y pluviales; en la calle Real, en el tramo entre el cruce de Juan Fuentes y hasta el puente del Bermaña, el agua alcanzó un nivel «nunca visto», llegando a entrar en establecimientos y viviendas y permaneciendo mucho tiempo; en las calles Juan Fuentes y Sarnadela, en el entorno del colegio San Fermín, se alcanzaron los 60 centímetros, teniendo que ser cortada al tráfico; mientras que la calle Fornos sufrió «unha riada en toda regra cun volume de auga importante e con elevada velocidade».
El PP alude a una zona en la que no había problemas, la avenida de Doña Urraca en su entronque con la travesía de Doña Urraca, donde se conectó recientemente el colector de pluviales y fecales que se instaló por el Camiño Portugués desde el alto del Pazo hasta el nuevo edificio multiusos. «As tapas dos sumidoiros se levantaron desbordando un volume de auga que anegou esa vía». En este caso, dice el principal grupo de la oposición, porque los colectores antiguos existentes en la avenida Doña Urraca necesitan una sustitución. «Son antigos e de fibrocemento, e non teñen sección suficiente para poder asumir os novos caudais aportados pola nova instalación realizada dende o referido alto do Pazo», explica.