Cuenta atrás para el derribo de las céntricas Galerías Oliva de Pontevedra: «Nos da pena, pero volveremos a emprender»
PONTEVEDRA CIUDAD
La cafetería Galería cerró este fin de semana, y la inminente salida de la tienda de comercio justo y la clínica podológica dejarán vacío un centro comercial que caerá con el derribo del edificio de Gutiérrez Mellado
03 ene 2023 . Actualizado a las 17:10 h.Las Galerías Oliva entran en su cuenta atrás. Un enorme cartel pegado en los cristales de la cafetería Galerías recuerda que tras nueve años de trabajo han tenido que echar el cierre ante la amenaza de derribo del edificio número 3 de la calle Gutiérrez Mellado. Sus clientes podrán seguir charlando con Pilar González, su propietaria, en El Pasaje de los Soportales y en menos de un mes, volverán a verla con su pincho de tortilla de nuevo en Gutiérrez Mellado, casi enfrente de la entrada de uno de los primeros centros comerciales de la ciudad que se apagan hasta su adiós definitivo el próximo 31 de enero. Es la fecha tope para abandonar los locales que ordenó Hercor Inversores SL, propietaria del inmueble.
Pilar se ha marchado. El próximo día 11 hará la mudanza la tienda de Comercio Xusto que estaba al lado y en la segunda quincena de enero, la clínica podológica Pedrosa y Millán abrirá su local en la calle Alhóndiga dejando atrás la ubicación en la que se hizo fuerte.
Este primer lunes de enero ya se apagó el bullicio que dejaba la terraza de la cafetería y la galería solo conserva el tráfico habitual de un pasadizo que une dos céntricas calles del centro de Pontevedra. No hay terraza ni el vaivén de los camareros. En su lugar, la luz apagada y la barra con las bandejas, como si solo fuese un descanso de días. Per no será así. El enorme cartel de la fachada reconoce que es un adiós definitivo. Todos los inquilinos de los bajos afectados de las Galerías Oliva tienen que dejar libres sus locales antes del 31 de enero porque la propiedad demolerá el edificio. De hecho, uno de estos bajos ya está tapiado, con carteles de inicio de obra. Trabajan a puerta cerrada. «Volvemos a emprender lejos de donde nacimos. Llevaba aquí nueve años, le cogí el relevo a una familia que había regentado el negocio durante dos generaciones», señala Pilar González desde su nueva ubicación en la cafetería Pasaje. Hace unos meses que teniendo sobre su negocio la amenaza del derribo, buscó una alternativa. El resultado fue este local de los Soportales que se traspasaba. Después llegó la oportunidad de mantenerse en la zona en la que hace nueve año cogió el relevo de una cafetería que le hizo enamorarse de la hostelería. Y no lo dudó.
A finales de enero abrirá Fame Nejra en la antigua Molanera. Lo hará junto a su pareja Diego Torrado. «Es una etapa que se cierra y que da paso a una nueva, podía esperar hasta el 31 de enero que nos marcaron los propietarios, pero decidí empezar el año con él ya cerrado para empezar un año fiscal», subraya González, que el día 30 de diciembre trabajó por última vez. Dejó en ella un sabor amargo de cerrar las puertas de un negocio donde se hizo con una clientela fiel y dio vida a este tramo de la galería.
Pilar deja la Oliva por obligación, como lo hará también la clínica podológica en breve. Las chicas de la tienda de comercio justo, Jasmín Pineda y Pilar Gutiérrez, ya piensan en la mudanza de los próximos días. Han buscado un nuevo bajo para instalarse, pero finalmente se moverán tan solo unos meteros.
El próximo 12 de enero abrirán en su nueva ubicación frente a la cafetería Delicius Bakery, en el tramo de las galerías que se salva, el que tiene la salida a la calle Oliva. «Nos enteramos de que derribarían el edificio por segundas personas, mucho después nos lo dijeron. En toda esa búsqueda no encontraron nada que pudiesen asumir. «Desde la organización preferían salir de las galerías, pero ahora nos vamos a un sitio más grande y mejor», explica Gutiérrez, que reconoce que para ellos es el peor momento para iniciar una mudanza. El 11 de enero cerrarán para abrir al día siguiente en el otro tramo de la Oliva. «Tendremos más visibilidad», apuntan.
Estos dos negocios son los últimos que quedan para completar la desbandada de comercios que ya se inicio hace meses cuando se conoció el proyecto de la promotora Hercor S.L. para el número 3 de Gutiérrez mellado. A Casiña dos Arreglos fue de las primeras en irse, lo hizo poco antes de que el taller de joyería Caruncho&Kodina. Tan pronto conocieron la noticia de la licencia de derribo, Marta y Camilo se trasladaron a Rosalía de Castro, de la misma forma que la frutería Isabel y la tienda de ropa de señora Milord.
En cuestión de días este tramo de las Galerías Oliva será un pasadizo fantasma esperando por la piqueta. Al mismo tiempo que ellos hacen las maletas, los inquilinos de Michelena 11, edifico para el que Hercor SL también pidió la orden de derribo han empezado a buscar alternativas. El 31 de enero también tendrán que dejar los bajos, mientras las oficinas de este edificio de Michelena 11 hay quien tiene una prórroga hasta junio.