El negocio de la cosmética coreana llega a Pontevedra tras su tirón en A Coruña: «Sin limpieza no hay belleza»

Nieves D. Amil
nieves d. amil PONTEVEDRA / LA VOZ

PONTEVEDRA CIUDAD

Verónica Sánchez, en su tienda Korean Dreams, de Pontevedra
Verónica Sánchez, en su tienda Korean Dreams, de Pontevedra ADRIÁN BAÚLDE

Verónica Sánchez montó hace nueve años su tienda en la ciudad herculina y expande su cadena hacia las Rías Baixas

07 abr 2025 . Actualizado a las 11:07 h.

Verónica Sánchez hace nueve años que recondujo su profesión para centrarse en un nuevo camino dentro de la cosmética. En este caso, huía de los tratamientos convencionales, optó por la cosmética coreana y abrió su primera tienda en A Coruña. Primero en la calle Juan Flórez y ahora se traslada a Emilio Pardo Bazán, muy cerquita de su actual ubicación ante el tirón comercial de sus productos. Korean Dreams fue una apuesta que hizo poco después de mudarse de Toledo a la ciudad Herculina. Ese primer paso abrió las puertas a un negocio en expansión poco habitual en Galicia. Pontevedra es su siguiente parada. Hace unos meses abrió su segunda tienda en la calle Castelao para intentar meter la cosmética coreana en el mercado de las Rías Baixas. Pudo haber ido a una ciudad más grande, como Vigo, pero Verónica reconoce que estudiaron dónde encajaría mejor. De Pontevedra le fascinó la apuesta por la peatonalización. «Aquí hay mucha vida, es más fácil salir de compras, no hace falta coger el coche para ir a hacer recados, el comercio está a pie de calle», explica Verónica, que apostó a ciegas por lo que ella considera una revolución cosmética. 

El espacio es minimalista, amplio, en tonos pastel y con unas luces de neón que iluminan el letrero «Korean Dreams» al fondo del comercio. En su interior solo se venden productos coreanos, una moda que va más allá de lo puntual y engloba una cultura al alza como el K-Pop. «Nuestros productos vienen importados de Corea del Sur y pasan unos controles muy exhaustivos. Todo está basado en las plantas medicinales, son muy estrictos con el tema de la higiene y lo tienen claro: sin limpieza, no hay belleza», señala Verónica, que reconoce que emplean técnicas tradicionales y ancestrales para un ritual que empieza aplicando los productos más líquidos y sigue con los más espesos para atenuar los poros. 

Tras algo menos de seis meses en la ciudad, las pontevedresas se van acercando poco a poco. Sánchez sabe que calar con este tipo de negocio en Pontevedra es un trabajo de tiempo, pero no duda de que llegará. Aunque la revolución de la cultura coreana seduce a los más jóvenes, con grupos de música de éxito o un código de vestimenta, esta empresaria apuesta por clientes de todas las edades. En unas calles como Castelao y Cruz Gallástegui, con una importante presencia de negocios asiáticos, Verónica asegura que aunque todo procede del mismo continente, nada tiene que ver con ese estilo de precios muy económicos y productos a granel. «Vengo del mundo de la cosmética médica, pero veía que le faltaba algo más. Me sorprendió la eficacia de estas cremas, con pocos químicos y con fórmulas basadas en plantas», señala la propietaria, que desde que abrió a orillas del Lérez, está buena parte de la semana en esta tienda y el resto, en la de A Coruña. Es el principio de una expansión comercial que a medio plazo espera abarcar más ciudades gallegas.