Investigan la muerte de una mujer de 84 años en Vilaboa que apareció con moratones en el cuerpo

La Voz VILABOA / LA VOZ

VILABOA

La casa de Acuña (Vilaboa), precintada por la Guardia Civil, donde apareció el cadáver de la mujer
La casa de Acuña (Vilaboa), precintada por la Guardia Civil, donde apareció el cadáver de la mujer Ramón Leiro

La Guardia Civil precintó la vivienda y mantiene abiertas todas las hipótesis. Un familiar directo de la víctima estaría en el foco de la investigación

26 jun 2024 . Actualizado a las 08:55 h.

El cuerpo de una mujer, María Julia Rosendo Lois, de 84 años, fue localizado sin vida este martes  en su casa del municipio pontevedrés de Vilaboa. La noticia trascendía a las tres de la tarde y la investigación sobre lo ocurrido se lleva con gran hermetismo, por lo que son pocos los detalles que se conocen hasta el momento. Fuentes de la Guardia Civil sí confirmaron a La Voz el hallazgo del cadáver en la casa, situada en el lugar de Acuña, en la parroquia de San Martiño de Vilaboa. Otras fuentes consultadas por La Voz revelaron que la muerte se produjo «en extrañas circunstancias», y que la víctima tenía, según esas versiones, moratones por el cuerpo cuyo origen se está intentando aclarar. En este momento de la investigación están abiertas todas las hipótesis sobre lo que pudo haber ocurrido.

Será la autopsia, que se hará en la delegación de Pontevedra del Instituto de Medicina Legal de Galicia (Imelga), la que determinará la causa del fallecimiento. El estudio del escenario del suceso será también otro factor a tener en cuenta y, sobre este particular, fuentes cercanas al caso señalaron que la Policía Judicial de la Guardia Civil ya estuvo examinando el lugar. Oficialmente no se ofreció ninguna información sobre el caso, pero al parecer un familiar directo de la mujer estaría en el foco de los investigadores, ya que en el pasado se produjeron agresiones.

Era viuda y residía con un hijo

Residentes del lugar recordaron ayer que la mujer era conocida por los vecinos como Julia, a de Orlindo, en referencia a su marido. Ella era viuda y residía con un hijo de unos 50 años de edad en la misma casa en la que apareció muerta. Se trata de una vivienda unifamiliar con una huerta alrededor. El acceso a la vivienda fue precintado por la Guardia Civil, que continúa con las investigaciones para esclarecer el suceso.

Vecinos cercanos a la casa se sorprendieron a primera hora de la mañana de ayer, cuando empezaron a llegar a la zona varios vehículos de la Guardia Civil con agentes que entraron en la vivienda para inspeccionarla. Poco tiempo después, los residentes se enteraron de que se había encontrado muerta a la propietaria de la casa, un hecho que fue muy comentado en el vecindario.

Quienes viven en las viviendas más próximas a la casa donde se encontró el cadáver de la mujer no quisieron pronunciarse sobre lo que pudo haber ocurrido en la vivienda. Sí hablaron de cómo era Julia, a la que definieron de una manera muy positiva: «Era moi boa muller, amable e que non se metía con ninguén, moi faladeira». Otros vecinos describieron el carácter de la fallecida como el de una mujer «muy alegre» a la que «le gustaba hablar con la gente».