Las empresas de alquiler de coches no ofertan automóviles deportivos o de lujo que sí se encuentran en otras capitales
14 ago 2009 . Actualizado a las 11:37 h.Si en una de sus películas James Bond destrozara su Aston Martin y diera con sus pasos en Santiago, no podría alquilar más que un turismo para moverse o salir de la ciudad. Algo que, como es lógico, lo despojaría de todo su glamur. Daría igual quien lo encarnara. Sean Connery, Pierce Brosnan o Daniel Craig no tendrían el mismo éxito sin sus vehículos. Su 007 quedaría tristemente reducido al cero.
Y es que Compostela no es país para ricos en lo que respecta al alquiler de vehículos de lujo. Mientras capitales como Madrid o Barcelona tienen a disposición un gran surtido de coches deportivos para todo aquel que quiera presumir de descapotable, Santiago, que nada tiene que envidiarles, no oferta esta clase de flota automovilística bañada en oro.
Las compañías de alquiler presentes en la ciudad, como Avis, Europcar o Hertz, no poseen coches más allá de un turismo o una berlina. Sin embargo, Avis, por ejemplo, cuenta con una flota de vehículos que, bajo el nombre de Avis Prestige, sí otorgarían a quien los quisiera una destacada posición en el inalcanzable mundo de las carteras de billetes de 500. O, como la propia compañía dice, «vehículos para cuando simplemente quieras darte un capricho». A pesar de todo, estos vehículos no se encuentran en Santiago, sino que habría que reservarlos para que los enviaran desde Madrid. Entre ellos uno se puede encontrar con un BMW 630, un BMW Z4, un Mercedes SLK 200 o los Porsche Boxter y Cayman. Coches con los que sin duda cualquiera atraería las miradas. Porque son justamente para eso, para atraer la atención.
Las series más básicas
Actualmente, en la ciudad monumental, uno, a pesar de no poder alquilar este tipo de coches, sí puede adquirirlos de alta gama, como Audi, BMW o Mercedes. Avis o Europcar poseen entre su flota las series A3, A4 y A6 de Audi. Hertz, por su parte, tiene un BMW Serie 3. Además de las compañías de alquiler conocidas, también hay firmas que pueden ofrecer vehículos, como Autos Brea, que posee todas las series de alta gama de Audi. En Santiago también existe FaroCars, una empresa que oferta a sus clientes vehículos lujosos, aunque siempre con un conductor de la compañía. Estos tienen en sus filas al coche de más lujo en lo que respecta al servicio público en Galicia un Mercedes Clase S.
Sin embargo, y aunque seguramente nadie dude de la importancia y el lujo de estos vehículos, no es lo que busca alguien que quiera atraer miradas. El glamur y el estilo de Bond, además de en la elegancia de sus trajes, radicaba en su vehículo. Si este se subiese a uno de los vehículos de alta gama disponibles en Santiago, sí atraería miradas, pero estas vendrían acompañadas de la frase: «Mira, un político importante». Y eso no sería lo esperado. Lo que realmente satisfaría sus deseos sería un: «Dios, menudo cochazo».