Sin los lesionados Kobe Bryant y Andrew Bynum, Pau Gasol se creció ante los Spurs de San Antonio (101-89) y, en uno de sus mejores partidos en la NBA, firmó una actuación espléndida. Con 21 puntos, 19 rebotes, 8 asistencias y 5 tapones, el ala-pívot español rozó el triple doble e impuso al final su ley en la pintura frente al determinante Tim Duncan, aunque la estrella de las Islas Vírgenes acabó con 16 puntos y 15 rebotes. A seis días del All Star de Dallas, Gasol se destapó con una actuación soberbia para intentar demostrar, como hicieron también el sábado ante Portland, que los Lakers no sufren kobedependencia .
Bajas de Kobe y Bynum
Contra los Spurs, Gasol y los suyos también superaron la adversidad de la baja de Bynum, por lo que el español, como pívot, tuvo que multiplicarse en la zona, y se exhibió, en ataque y en defensa. El catalán fue el jugador más valorado del encuentro y el máximo anotador (junto a Manu Ginóbili), reboteador, asistente (con los mismos pases que Tony Parker) y taponador. Solo cometió dos personales en 46 minutos y también robó un balón, aunque perdió dos.
Salvo en un encuentro a lo largo del presente curso en el que ha sufrido ya dos lesiones musculares, Gasol nunca había tirado tanto (en 20 ocasiones), y aunque no estuvo muy certero (ocho lanzamientos acertados), estuvo infalible desde la línea de personal: 5 de 5.
La fuerza del grupo
Como líder indiscutible de los Lakers sin la presencia de Kobe, Pau Gasol respondió con grandeza a su rol y disfrutó con su papel, aunque no dudó en elogiar la fuerza del grupo. «Hay equipo más allá de Kobe Bryant y Andrew Bynum», se congratuló el español.
Además de Gasol, otros cuatro jugadores de los Lakers acabaron con dobles dígitos, encabezados por Ron Artest (18 puntos) y Lamar Odom (16), y desde el banquillo por Jordan Farmar y Sasha Vujacic.
El esguince de tobillo de Kobe Bryant y la lesión en la cadera de Bynum provocaron que los reservas tuviesen más minutos, pero fue el de Sant Boi quien se echó el equipo a las espaldas y dio alas a sus compañeros, sobreponiéndose a su discreto inicio de partido para ser capaz de participar con acierto en todas las facetas del juego y hacerse respetar por Tim Duncan. Ni él ni Antonio McDyess pudieron anular a un Gasol que logró 6 puntos y 10 rebotes antes del descanso, pero a partir del tercer cuarto explotó en el lanzamiento y no flojeó su sacrificio defensivo.
Calidad en los reservas
Autoritario en el interior, repartió juego y encontró una gran respuesta por parte de sus compañeros, tan acostumbrados a quedar a expensas de Kobe y numerosas veces muy criticados por su pésimo rendimiento. «Tenemos calidad y contamos siempre con quienes no juegan demasiado. Esa es la naturaleza de nuestro equipo y es un gran lujo. Todos deben aceptar su papel y darlo todo cuando lo necesitamos», apuntó el español tras la segunda victoria consecutiva sin Kobe Bryant, aunque sin el gran astro de Filadelfia la conquista de otro anillo aparezca como muy lejana para los actuales Lakers.
Pau Gasol se está encargando de que, pese a tan importante contratiempo, los actuales campeones de la NBA confíen cada vez más en sí mismos y den un paso al frente liderados por el talento y la ambición de la estrella española.