Mal terminó el curso político en Teo tras un debate plenario que se auguraba especialmente denso porque el principal asunto del orden del día era la comparecencia, solicitada por el PSOE, de la edila Carme Hermida.
Su intervención fue seguida con absoluta indiferencia por el independiente Manuel Parajó, que no hizo intervención alguna. Frente a este mutismo, Armando Blanco soltó perlas dialécticas dirigidas a Martiño Noriega tales como «vostede ten uns aparatos que non lle collen na bolsa», una afirmación que minutos después casi calcó par referirse al portavoz socialista, Jano Leis.
Armando Blanco también aprovechó el pleno para afirmar, brazo en alto y palma abierta, lo siguiente: «Respecto todas as ideoloxías, eu podería cantar o Cara al Sol, pero xa o cantei antes».
Con semejantes perlas, el ambiente se fue caldeando hasta el punto de que el regidor, Martiño Noriega, ordenó un receso para enfriar el debate. En este impás, Armando Blanco anunció su deseo de abandonar el pleno, pero optó por preguntar a Leis si necesitaba que su grupo continuase en el debate para apoyar la petición de comparecencia de Noriega. El socialista le pidió que no se fuese y Blanco y todos los ediles del PP permanecieron hasta el final, aunque el asunto no se pudo debatir por falta de tiempo.
La caja de Pandora se abrió nada más levantarse la sesión. El portavoz socialista lamentó que no quedase tiempo para reflexionar en el pleno sobre lo acontecido en Navidad con motivo del artefacto explosivo que destrozó la sede del PSOE en Cacheiras. Así, Jano Leis acusó al regidor, Martiño Noriega, de acudir a la sede demasiado tarde y solamente para dejarse ver. También criticó a Carme Hermida, que le exigió una rectificación. El regidor, en el mismo tono que Leis, le recomendó un tratamiento con Prozac.
Al día siguiente del pleno, el responsable local del BNG, renato Núñez, exigió una rectificación a Leis y afirmó que el PSOE también debería pedírsela porque «non todo vale».