Parciales cada diez minutos: 8-19, 12-17 (20-36, en el descanso), 21-13 y 21-9 (62-58, final)
Árbitros: Mitjana, Peruga y Martínez Díez.
Incidencias: Cuarta jornada de la Liga ACB. Palacio de los Deportes de la Comunidad de Madrid. Tres cuartos de entrada.
Granger (6), Wright (14), Jiménez (4), Clark y Simmons (8) -cinco inicial- Gabriel (13), Flores (15), Jaime Fernández (2) y Martínez.
Salgado (7), Vidal (12), Panko (14) y Betts (4), Papamarkarios (3), -cinco inicial- Baron (8), Doblas (7), Larant (3), Adekele y Neto.
Un increíble Estudiantes remontó 21 puntos en 15 minutos para hundir al Lagun Aro, que ha perdido los cuatro primeros encuentros. Jiménez, Gabriel, Flores y Wright dieron la vuelta a un partido que mediado el tercer periodo parecía perdido para los locales con un juego lamentable.
Los visitantes dieron un repaso al Estudiantes en los primeros diez minutos (8-19) y ampliaron la renta hasta el descanso (20-36). En la reanudación, cinco puntos seguidos de los colegiales fueron contestados inmediatamente por los donostiarras con otro parcial de 10-0 que dejaba veintiún puntos de ventaja para los del Lagun Aro (25-46) y el partido casi sentenciado.
Pero una técnica pitada al base estudiantil Jaime Fernández metió a su equipo y a su público en el encuentro en el minuto 24. Los de Pepu, liderados por Carlos Jiménez, sobresaliente en defensa, resucitaron entonces y con su afición volcada propinaron un parcial de 16-3 a los guipuzcoanos y abrieron el encuentro de cara al último periodo. En un suspiro, el Estudiantes había pasado todos sus males al Lagun Aro.
Otros once puntos consecutivos de los colegiales por solo una canasta de dos de Vidal, en los primeros minutos del último cuarto, dieron la primera ventaja al estudiantes (52-51) a falta de cinco minutos. El acierto de Flores y Wright en los libres, más un gran rebote de Jiménez en ataque, y los errores continuados de los visitantes en el tiro exterior dejaron un 60-55 a siete segundos. Salgado dejó a dos a los vascos, pero Flores anotó los tiros libres que decantaron definitivamente el partido.