Urgen la reparación de las barandillas de las pasarelas del Sar en el centro de Padrón

Uxía López Rodríguez
uxía lópez PADRÓN / LA VOZ

SANTIAGO

MERCE ARES

Muchos padroneses alertan de que el deterioro de estas estructuras es ya un peligro para quienes las usan a diario

19 mar 2018 . Actualizado a las 00:26 h.

Las barandillas de las dos pasarelas metálicas que cruzan el río Sar en el núcleo urbano de Padrón llaman la atención de todos, por lo deterioradas y degradadas que están. «Fatal», «horribles», «unha vergoña» y «un perigo» son los calificativos que más se escuchan entre muchas de las personas que las usan a diario, sobre todo para ir a los centros escolares situados del otro lado del río, dos de Educación Secundaria y uno de Infantil y Primaria.

El deterioro de las barandillas es generalizado, pero más acusado en la que está en la pasarela del Paseo del Espolón. Está llena de óxido, con las bases totalmente deterioradas y con una de las esquinas rotas por completo, hasta el punto de que quedan los hierros a la vista y, en un extremo, casi no cumple su función: proteger de la caída al río.

Muy utilizadas

«Me alegro de que le hagáis fotografías; a ver si toman medidas», dice una vecina. Ese deterioro no es de un año ni de dos. «Nunca lle botaron unha man máis alá de pintalas un pouco; supoño que agora as cambiarán por completo», opina otra padronesa. El estado de abandono es más grave si cabe teniendo en cuenta el uso que tienen las dos pasarelas, por las que a diario pasan cientos de personas, desde los propios estudiantes de los IES Camilo José Cela y Macías o Namorado, del CEIP Flavia hasta los padres de los niños de este último colegio.

El arreglo o sustitución de las barandillas está incluido en un plan de obras del 2015. Figura en un proyecto conjunto con la construcción de una rampa de acceso al cementerio del monte Santiaguiño. En el caso de las barandillas, está previsto sustituir más de 230 metros y pintar más de 800 metros.

El alcalde de Padrón, Antonio Fernández Angueira, informó de que estas obras están en fase de licitación y el plazo para presentar ofertas finaliza esta semana. El retraso se debe, según explicó el regidor, a los permisos, como el de Patrimonio para la rampa del cementerio, que obligó a realizar modificaciones en el proyecto.