Todas las miradas puestas en Bugallo

Domingos Sampedro
d. sampedro SANTIAGO / LA VOZ

SANTIAGO

XOAN A. SOLER

El exalcalde del PSOE empieza a valorar la opción de ir a unas primarias para ser candidato a Raxoi

03 sep 2018 . Actualizado a las 05:00 h.

Xosé Sánchez Bugallo, exalcalde de Santiago, ocupó el pasado sábado una plaza en el fondo sur de la comida celebrada por el PSOE en Sigüeiro por el inicio del curso político. Comió pulpo en una esquina, junto a un puñado de compañeros compostelanos, muy alejado de las sillas que ocupaban quienes ahora mandan en el partido. No obstante, en la conversación de los que mandan afloró varias veces el nombre de Bugallo como potencial candidato a la alcaldía de Santiago, una opción que se revitaliza ahora que el propio interesado empieza a mostrar su disposición a ser elegido en unas primarias.

El PSdeG valoró ya tres encuestas diferentes, sobre posibles aspirantes a Raxoi, que tiene un común denominador: el que fuera alcalde entre 1998 y el 2011 es la persona mejor valorada para volver a ser de candidato, es el más conocido, a mucha distancia sobre el resto, y es el que garantizaría el mejor resultado electoral de antemano.

En la calle Ferraz, donde Bugallo fue recibido hace unas semanas, se ha instalado el pragmatismo y más allá de un nombre u otro, lo que quieren es promover a candidatos que proporcionen los mejores resultados posibles, sobre todo en los lugares más emblemáticos, como son las grandes ciudades o las capitales autonómicas. Es por ello que la operación Bugallo, pese a no suscitar un gran entusiasmo en algunos sectores del partido, es bien vista por el equipo de Pedro Sánchez al colocar al PSOE en la posición de competir con fuerza por la alcaldía compostelana.

Solo hay un inconveniente para cerrar la operación, y es el propio Bugallo. Cuando hay ya un aspirante que empezó a competir por ser candidato en Santiago, Gumersindo Guinarte, lo más lógico es que el exalcalde acepte el reto de ser elegido candidato en primarias. Hasta hace muy poco, Bugallo estaba cerrado en banda, anhelando la aclamación que hoy nadie puede darle. Pero en su entorno han empezado a presionar. Desde Leiceaga, presidente del PSdeG, hasta el exalcalde Xerardo Estévez. Quieren a Bugallo de candidato. Y por eso el interesado medita la forma de lanzarse a la arena.

El único escollo es que Gonzalo Caballero bloquee la operación

Uno de los principales inconvenientes que tiene la operación para erigir a Bugallo es que para algunos este regreso al pasado -Bugallo ya fue candidato en 1999, en el otro siglo- no despierta un gran entusiasmo.

Pero el verdadero drama del PSdeG es que no tiene un candidato mejor en la ciudad. De haberlo, nadie miraría el retrovisor. Incluso el profesor universitario Gumersindo Guinarte, una persona de talante y bien considerada en el partido, parece haber renunciado a competir con energía por ser candidato, pues su actividad interna se limitó a lanzar su candidatura hace tres meses.

Así que el debate en el PSOE de Santiago está abierto, con el camino cada vez más desbrozado para Bugallo. Solo el secretario general del PSdeG, Gonzalo Caballero, tiene capacidad y mando en plaza para bloquear la operación. Contentaría a sus fieles en la agrupación compostelana, que quieren ganar espacio echando a Bugallo, pero asumiría con ello un riesgo enorme.