El repunte de coches de gasolina en la provincia compensa la caída del diésel

No hay una vuelta a los orígenes ni habrá un vuelco salvaje en la tendencia de compra de vehículos. Pese a la paulatina caída de adquisiciones de automóviles diésel, el futuro del sector pasa por la convivencia de las tecnologías de siempre con las de nuevo sello. Así lo constata Raúl Morales, directivo de Faconauto, que asume que «la demanda se está desplazando a la gasolina, pero también hacia los híbridos que, principalmente, funcionan con gas».

Los datos hasta octubre certifican este escenario en la provincia de A Coruña. Jacobo Ramos, gerente del concesionario Fiateira Motor en la ciudad herculina, detalla que «en el acumulado anual se han matriculado 16.601 turismos, lo que indica una curva de incremento del 10,8 % en comparación con el 2017». Ahí asoman datos interesantes: Peugeot es la marca con el índice más elevado de adquisición, con 1.510 ventas; Jeep, por su parte, experimenta el mayor porcentaje de subida, con un 125,42 % tras la matriculación de 133 coches este curso.

Ese repunte de Peugeot, que lideró las ventas de octubre en la provincia con 163 unidades, es justificado por Noemi Navas, de Anfac, por la tendencia a «comprar vehículos referenciados a la comunidad autónoma», en alusión a la fábrica de PSA en Vigo. La marca francesa es seguida de cerca por Seat, que alcanzó el pasado mes un total de 124 matriculaciones y llevó su volumen total del 2018 a 1.305 vehículos. El podio lo completa Toyota, con 105 ventas, una variación positiva del 0,96 % en octubre y 1.107 ventas en el acúmulo del año.

En este sentido, Ramos incide en la progresiva introducción del fabricante japonés: «Con el modelo Aygo se han adentrado con éxito en el entorno urbano, donde hay un segmento de competidores cada vez más amplio y donde confluyen sin duda más clientes».

Ya en profundidad, en la provincia de A Coruña sí se percibe una devolución de la confianza a los vehículos de gasolina: del total matriculado en lo que va del 2018, 8.487 usaban este tipo de combustible, por 6.729 de diésel y 1.385 adaptados a otras tecnologías. En porcentajes, implica que los segundos pierden una cuota de más del 16 % con respecto al 2017, según datos que recoge el Instituto Español de Automoción (IEA).

La caída ha sido especialmente acusada en octubre, con una disminución del 27,29 % que, en gran parte, derivó de la nueva normativa de medición de emisiones de CO2, el WLTP, en vigor desde el 1 de septiembre y que busca contextos más realistas en el análisis de consumos de combustible de gasolina y diésel. Así, la cuota de ventas del mes sitúa a los vehículos de gasolina en un 55,90 %, con los diésel en el 34,20 % y los de otros combustibles en el 9,90 %.

Estas últimas cifras, además, invitan a pensar en un futuro más heterogéneo de opciones de compra por el lento, pero continuo, avance de los vehículos híbridos y eléctricos. «La gente busca nuevas formas de movilidad y un consumo de combustible más contenido, así que hay hueco para todos», zanja Elías Domingo, de Ganvam.

16.601

Matriculaciones en A Coruña

Es la provincia gallega con el número más elevado en el 2018. Pontevedra suma 12.248.

A Coruña lidera la venta de híbridos y eléctricos: 145 automóviles en el mes de octubre

Raúl Morales, director de comunicación de Faconauto, vislumbra que, a medio plazo, «coexistirán todas las tecnologías disponibles», pero avanza que «se va hacia una movilidad híbrida».

Si se atiende al volumen de automóviles matriculados en Galicia a lo largo del 2018, su teoría encuentra un sustento: 3.020 unidades fueron vendidas en el acumulado del año y, concretamente, 369 durante el mes de octubre. Y de ese número, 145 fueron adquisiciones realizadas en la provincia de A Coruña, lo que la sitúa en cabeza de la comunidad. De hecho, estos datos implican una variación positiva de un 34,26 % y una cuota del 9,90 % en el cómputo mensual, certificando que también gana terreno al diésel en estos momentos.

Inquerido sobre la cuestión, Elías Domingo, de Ganvam, certifica que «sí se percibe que hay que hacer una transición hacia el futuro, hacia una movilidad más sostenible, pero de forma ordenada y teniendo en cuenta a todo el sector». De ahí que, bajo su punto de vista, lo idóneo sea «no demonizar ninguna tecnología de buenas a primeras».

El horizonte de los eléctricos, sin embargo, aún genera alguna duda. Morales incide en que su aceptación «va más lenta de lo esperado» y Noemi Navas, de Anfac, alude a las barreras de adquisición: «El precio de entrada es más alto, y se necesitan planes de ayuda y estrategia de las Administraciones públicas».

El dato anecdótico es para Tesla, con tres matriculaciones en la provincia de A Coruña y una en Pontevedra en este 2018.

«Nos quedamos con el titular de que el diésel va a terminar, y es demasiado apocalíptico»

p. v.

No es factible realizar una estimación totalmente fiable de hacia dónde irá el sector, pero desde el Grupo Rumbao, con concesionarios en A Coruña, Ferrol y Santiago, sí ponen el acento en la coexistencia de tecnologías como la clave a medio plazo. Así lo ve Jacobo Ramos, gerente de Fiateira Motor en la urbe coruñesa.

-¿Qué escenario se aguarda en el mercado automovilístico para el tramo final del año?

-El mejor de los panoramas es que el mercado se mantenga plano hasta que finalice el curso. El más realista, que caiga entre un 4 y un 6 % siguiendo la tendencia de septiembre y octubre.

-¿Ha confundido la ciudadanía el mensaje con respecto al diésel?

-Nos quedamos con el titular de que el diésel se va a terminar, y es demasiado apocalíptico. Debe haber una racionalización, y entender que el consumo y la eficiencia del automóvil dependen también de los kilometrajes.

-¿Hay diferencias de consumo en España con respecto al resto de la Unión Europea?

-El mercado español es uno de los más competidos dentro del continente. Lo comparten cuatro o cinco marcas de forma rotativa, y no es como el francés o el alemán, donde predominan Renault y Volkswagen. Además, el espectro de marcas se ha ampliado más en el entorno de las ciudades con Mazda o Toyota. En nuestro caso, el modelo del Fiat 500 es líder indiscutible.

-El futuro también parece variado para las tecnologías a disposición del consumidor.

-Va a haber más alternativas de las que hay en estos momentos. Pero el problema actual de las emisiones de dióxido de carbono son, en realidad, la pervivencia de tecnologías obsoletas y, en ocasiones, la venta de coches de segunda o tercera mano. Y, en realidad, ambas cosas están bastante vinculadas.

-¿Y los eléctricos?

-Es cierto que se identifican con la conciencia medioambiental y cero emisiones, pero también hay costes ecológicos en producción de energía o fabricación de baterías.

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