Volverá a un carril por sentido y tendrá un tercero especializado para el acceso a la futura estación de autobuses
16 oct 2020 . Actualizado a las 13:57 h.Con algunas semanas de retraso sobre el calendario inicialmente previsto, aunque todavía en plazo para garantizar su nueva función de acceso rodado a la futura estación de autobuses, el vial de Clara Campoamor reabrirá hoy al tráfico tras la conclusión de las obras de reforma que han modificado su configuración.
El trazado que vuelve a garantizar la conexión directa entre la avenida de Lugo y Pontepedriña, evitando el rodeo que implica la alternativa por la rotonda de A Galuresa, vuelve a estar operativo con varias novedades en un diseño que ha ejecutado el Concello. Por una parte, el vial pasa de los cuatro carriles que tenía hasta ahora a solo dos, al perder uno en cada sentido de la circulación. Este cambio permite priorizar el acceso de los buses a la nueva estación, uno de los hitos arquitectónicos de la intermodal. Pero también aporta el espacio necesario para cumplir con el propósito de facilitar el tránsito peatonal, que se materializa en la apertura de amplias aceras en las dos márgenes, y la circulación de ciclistas, para los que se ha habilitado un carril bici en la parte del trazado que linda con las brañas de Sar.
Junto a estas características de diseño, la otra novedad viene determinada por la reducción de la velocidad máxima permitida en ese trazado, que pasa de 50 a 30 kilómetros por hora.
Los operarios de la adjudicataria del proyecto dedicaron los últimos días a apurar los remates para tener todo a punto para abrir hoy al tráfico la vía. En las jornadas de miércoles y jueves se corrigieron algunos defectos que afectaban a los pasos de peatones situados en ambos extremos del trazado. Además, reasfaltaron algún punto y se volvió a pintar la calle. Solo queda pendiente la plantación de árboles en las zonas habilitadas, una tarea que se pospone unas semanas a la espera del tiempo más propicio para acometer estas labores. Con este vial en servicio solo queda la apertura de la estación de buses, que ya está prácticamente rematada.