Fontiñas, zona cero del fiasco socialista en Santiago

s. lorenzo SANTIAGO / LA VOZ

SANTIAGO

XOAN A. SOLER

PP y BNG doblegaron al PSOE en uno sus principales feudos, pese a que las dos únicas secciones electorales en las que ganó el domingo están en el barrio

31 may 2023 . Actualizado a las 05:00 h.

Los compostelanos tiñeron de azul con sus votos un mapa electoral que en las municipales del 2019 habían moteado de rojo. La debacle socialista fue general en todos los distritos de la ciudad. Apenas se salvaron un par de secciones y las dos están en Fontiñas, uno de los feudos tradicionales del PSOE, en el que su batacazo del domingo resultó por ello más significativo. La candidatura liderada por Bugallo pasó de la holgada victoria obtenida hace cuatro años a ser esta vez la tercera opción de los electores del barrio, por detrás de PP y BNG. Los más de 2.700 votos de entonces se vieron reducidos a menos de la mitad, una caída mucho mayor que la media del PSOE en el municipio, donde abandonaron a Bugallo el 42 % de los electores que en el 2019 le habían brindado su quinto mandato.

Aun así, en Fontiñas están las dos únicas secciones de Santiago en las que los socialistas contabilizaron el domingo más papeletas que el resto. Los apoyos en el barrio estuvieron muy repartidos. El PSOE fue el más votado en la cuadrícula que forman la avenida de Lugo y las rúas Londres, Berlín y Dublín. Y también más al norte del Fontiñas, entre las rúas Praga, Roma y do Valiño. Por su parte, el PP fue la primera apuesta entre los electores de Área Central y su entorno, y en O Vieiro; y el BNG se impuso en el resto del barrio, como en los colegios del IES de Fontiñas, en el CEIP y en el Centro Sociocultural. En esas zonas que apoyaron la lista de Goretti Sanmartín —vencedora en cinco colegios de la ciudad— se apreció con nitidez el trasvase de votos de vecinos que en el 2019 se habían inclinado por Compostela Aberta (CA).

Supremacía de los populares

Lógicamente, el varapalo recibido por el PSOE no se explica solo por sus resultados en Fontiñas. Hace cuatro años logró ser la primera fuerza en 37 de los 53 colegios y el PP ganó en 16. Pero el domingo los de Borja Verea se impusieron en 46 de los 51 colegios. Extendieron su tradicional supremacía en el Ensanche y las parroquias del rural —en el 2019 Bugallo había logrado la victoria en la periferia central y sur— al resto de la ciudad, una victoria aplastante que, sin embargo, resultó insuficiente para salvar el listón de la mayoría absoluta, imprescindible para gobernar sin el favor de las fuerzas de izquierda. El PP pescó en todos los caladeros. Además de imponerse en Fontiñas, lo hizo en el casco histórico, Santa Marta, Conxo, Sar, Vidán, Paxonal, O Castiñeiriño, Guadalupe, Vite, Angrois, Meixonfrío y muchos barrios más de la ciudad en los que el PSOE tuvo históricamente generosos graneros. En el IES Rosalía de Castro, el PP alcanzó su techo, con 1.032 votos. Son tantas zonas que es más sencillo delimitarlas especificando las excepciones, como aquellas en las que el BNG fue el que recolectó más apoyos.

XOAN A. SOLER

 Los territorios nacionalistas

Goretti Sanmartín fue la candidata más votada en el entorno de San Caetano, en A Almáciga, Belvís y en el ámbito de Salgueiriños más próximo a la sede de Hacienda, delimitada entre la avenida do Cruceiro da Coruña, la rúa Melide y el Camiño dos Vilares. En esos barrios, el BNG se hizo con la condición de primera fuerza que hace cuatro años había obtenido el PSOE. Ahí fraguaron los nacionalistas esa diferencia próxima al millar de votos —11.428 recibió el Bloque, 6.558 más que en el 2019, frente a 10.513 que conquistó el PSOE, 7.637 menos que en los anteriores comicios locales— que les permite liderar la negociación con las otras dos fuerzas progresistas de cara a la investidura de Goretti Sanmartín como la primera alcaldesa de Santiago el 17 de junio.

El casco histórico pasó factura

La otra clave está en que el músculo de la candidatura del BNG no se limitó a los barrios en los que fue la opción más votada, sino que en muchos de aquellos donde triunfó el PP de Borja Verea los nacionalistas emergieron como primera alternativa por delante de la lista de Bugallo. Así sucedió en muchas secciones electorales del casco histórico, frente de decisiones que suscitaron controversia ciudadana durante el último mandato en Raxoi. La distribución del voto en la zona monumental supuso otro duro castigo para las aspiraciones socialistas, que en casi todas las secciones vio reducido el domingo a la mitad, incluso a menos, el caudal de apoyos que había cosechado cuatro años atrás. Por ejemplo, en la sección 1 del distrito 2, mientras el PSOE cayó del 27,1 % de los votos que obtuvo el 2019 al 13 %, el Bloque escaló desde el 8,7 hasta el 27,5 %.