Sin concierto

Cristóbal Ramírez

SANTIAGO

17 jun 2024 . Actualizado a las 05:00 h.

No es buena cosa escribir dos veces en poco tiempo sobre un asunto similar, pero hay ocasiones en las que resulta necesario: no va a haber concierto de combos en la escuela de música municipal de Oroso. Ese acto ya tradicional desde hace muchos años en el que se citaban docenas de niños y adolescentes y dos centenares de familiares, con tanta gente que había que hacer dos pases por edades porque no cabían en el auditorio del amplio centro cultural, no va a tener lugar.

La responsabilidad primera es de la empresa, una empresa cuya gestión es como mínimo —y no entremos en honduras— errática, y que al parecer termina su contrato este año. Buen momento para no renovárselo. A pesar de los esfuerzos de los profesores —para quienes solo cabe el aplauso— el cambio constante de otros colegas suyos que venían y se iban, y que en más de un caso duraron una semana, no hubo manera de consolidar los combos y ensayar, así que cundió el desánimo y ya ni la semana anterior ni esta acudió casi nadie. ¿Para qué?

Pero la responsabilidad siguiente es del Concello, con el alcalde y la concejala de Cultura al frente. ¿Cómo es posible que no se dieran cuenta del desmadre —perdón por la palabra, pero no se me ocurre otra— que había dentro? ¿Cómo es que no tomaron cartas en el asunto y pusieron firmes a la empresa por las buenas o por el artículo 14? ¿Qué liderazgo es ese?

Así que hubo conciertos en Navidad y por carnavales, luego la empresa dio el portazo y la traca final queda para nunca. De forma que mi hija no actuará, dice —como su grupo— que el año que viene no vuelve y su padre, el firmante y también alumno de una escuela de música que tuvo momentos de gloria, queda sin poder aplaudirle.