Víctor Pazos, director deportivo: «Buscamos un Compos competitivo, con más juventud y más energía»

Víctor Manuel Pazos Recarey (Santa Comba 1983) es un apasionado del fútbol. Una lesión le obligó a colgar las botas prematuramente, con solo 24 años. Pero nunca se desconectó. Se reorientó hacia los banquillos y la gestión. Desembarcó en San Lázaro en la temporada 17/18, para centrarse en el fútbol base. En noviembre, a raíz de la marcha de Manuel Castiñeiras, asumió la dirección deportiva del primer equipo. Y ahora está en plena efervescencia, apurando los últimos movimientos para conformar el Compostela 24/25. Los entrenamientos empiezan este miércoles, pero todavía habrá fichajes que lleguen con la pretemporada en marcha. Pocos, porque quedan, a los sumo, cuatro piezas para completar la estructura.

—Antes de ponerse manos a la obra con el nuevo proyecto lo primero siempre es analizar el anterior. ¿Cuál fue el diagnóstico?

—El diagnóstico empezó antes. Desde principios de año ya se iba viendo lo que podíamos cambiar o mejorar. Se hicieron tres fichajes en el mercado de invierno. Ya se fue trabajando y pensando en junio.

—¿Y si hubiera que ponerle una palabra a ese diagnóstico?

—Diría buscar energía. Puede parecer ambiguo. Puede ser juventud en unos casos. En otros, veteranos con más vigor. Y otra cosa que vimos, y que también se puede extender a temporadas anteriores, es la dificultad para competir en campos complicados de esta categoría, por sus dimensiones y por ser se hierba artificial. Ahí tenemos un gran debe.

—Efectivamente, están llegando futbolistas de más vigor, quizás con menos recorrido en la categoría.

—En unos caso sí, porque son jugadores que vienen de Tercera. Pero también hemos firmado gente con experiencia, con menos nombre en el grupo 1, pero ya con una trayectoria en Segunda RFEF. Buscamos un Compos competitivo, con más juventud y más energía.

—Los tiempos para fichar no son fáciles de manejar. Todavía queda un trabajo complicado.

—Claramente. Además, no nos podemos olvidar del tema económico. Vamos a tener uno de los grandes presupuestos, pero nuestra filosofía es ajustarnos a esas cifras y no hacer fichajes que las puedan descuadrar. Esa es la primera premisa. A partir de ahí, buscamos los jugadores que nos parecen interesantes y que se identifiquen con el proyecto.

—Lo primero fue la elección de entrenador y parece que no hubo dudas con Permuy.

—No. Desde que cogen el equipo Antón Permuy y Dani Gesto, a raíz de la marcha de Michel, era una opción que barajábamos. Para que un proyecto crezca es bueno no cambiar continuamente. Son gente de la casa, de Santiago, bien formados... Ya antes de acabar la temporada se hizo la renovación porque pensamos en el largo plazo.

—Una cosa es proponer y otra disponer. Pero, ¿qué tipo de Compostela veremos este curso?

—Un equipo en la línea de las cuatro o cinco últimas jornadas, un equipo que quiere ser dominador, agresivo en la presión, que recupere cuanto antes el balón, que sea protagonista en cuanto a la posesión y el dominio del partido. Es lo que se busca, sobre todo en casa.

—¿De dominar a través de la posesión?

—Este es un asunto complejo. Hay equipos, como el Pontevedra, que manejan posesiones muy larga. Otros, como el Zamora, que pueden tener el balón pero también hacer daño al contragolpe. La idea es aunar esas dos facetas y también intentar crear peligro atacando los espacios.

—Un gran reto es ensamblar pronto y arrancar bien.

—Exactamente. Tenemos que empezar muy enchufados, conseguir ser desde el inicio un equipo muy fuerte, intentar comenzar bien, que es algo que se nos resiste, engancharnos arriba desde el principio para no caer en esos grupos de zona media baja.

«Faltan un máximo de cuatro fichajes y un mínimo tres»

De la pasada campaña siguen en la plantilla Roque, Álvaro Casas, Kike, Pablo Crespo, David Soto, Samu, Pablo Antas, Hugo Matos y Manu Barreiro. Landeira también tendrá ficha con el primer equipo. Y han llegado Rabanillo, Diego González, Manu Rivas, Santi de Prado, Giuliano Bertino y Jesús Ocaña.

—¿Cuántos fichajes faltan?

—Un máximo cuatro y un mínimo tres. Un portero, un delantero que complemente a Manu Barreiro y un extremo derecho. Y queda abierta una puerta a un cuarto, para un media punta o alguna carencia que se vea en pretemporada. O alguna lesión.

—¿Y un pasador en medio campo?

—Podría ser esa figura que nos pueda sumar como cuarto fichaje. Pablo Antas lo puede hacer. En cualquier caso, el sistema que teníamos, ese 3-4-3 o 5-4-1, es para jugar con dos mediocentros. Acabaron la campaña Antas y Samu. Llega Dieguito, que tiene buen pie. A Antón también le gusta buscar esa función más con el extremo que se viene hacia dentro y le deja recorrido al lateral.

—¿Buscan un portero contrastado o más bien un joven que le pueda discutir el puesto a Rabanillo?

—Más bien un joven con proyección.

—Acertar con un goleador es siempre lo más difícil, y una llave maestra para hacer un gran año.

—Manu necesita un compañero de batalla. No puede jugar el cien por cien, todos los partidos y todos los minutos. Alguien que le descargue de responsabilidad. Que nos dé algo diferente, por si tienen que jugar juntos.

—Supongo que ahí toca esperar, o cuando menos asumir que puede tardar en llegar esa pieza.

—Sí, puede ser, porque en el fútbol lo que más se paga es el gol. Si queremos aspirar de inicio a jugadores potentes para esa posición, tenemos que ir a un mercado largo. Hay jugadores que hasta que se les cierren las puertas de Primera RFEF no van a apurarse. También cabe la opción de alguna cesión de equipos de Primera o Segunda División, pero en este caso también hay que esperar porque hasta agosto no suelen decidir.

«Cambiar los entrenamientos para la tarde es una clara apuesta por la cantera»

Kike, Hugo Matos y Landeira son jugadores que han llegado al primer equipo desde la base. Además, retornan Santi de Prado y Manu Rivas. El club quiere seguir cuidando ese vivero.

—¿La cantera va a tener, de verdad, peso específico?

—Con toda seguridad. Cambiar los entrenamientos para tarde es una clara apuesta por la cantera, para que los jóvenes tengan las mismas oportunidades, porque muchos no pueden compatibilizar con las mañanas por los estudios. Entrenar por las tardes permite a todo el mundo estar en igualdad de condiciones. Además, Dani Varela y Sálamo van a estar todo año en dinámica. Landeira ya da el salto al primer equipo. Balsa y Baña también van a estar ahí. Algunos ya fueron contando con minutos la pasada temporada.

—Por cierto, tienen ya cubierto el mínimo de seis fichas sub 23 que se exigen en caso de cubrir todas las disponibles.

—Sí, pero no es algo buscado porque vamos a una plantilla corta porque, precisamente, confiamos en la cantera. Pensamos que los sub 23 van a ser importantes en el equipo.

Pontevedra, Salamanca, Avilés, Numancia, los filiales...

Todavía faltan fichajes importantes en casi todos los equipos, pero ya se van completando las plantillas para le nuevo curso.

—¿A quiénes ve como principales rivales para estar arriba?

—El Pontevedra conserva la dupla Rufo Charly, que la pasada campaña se fue a más de treinta goles. Por cómo se están moviendo en el mercado, Avilés y Salamanca van a ser candidatos. Y ojo con los filiales, el Valladolid Promesas y el Fabril, que están incorporando gente muy interesante. El Numancia también maneja un gran presupuesto y es de los que va a estar arriba.

—El 26 de julio ya jugarán un amistoso frente al Arenteiro en Portonovo. ¿Buscarán una pretemporada con muchos partidos o con más sesiones de entrenamiento y menos pruebas?

—La idea es hacer partidos todos los fines de semana y algún miércoles por el medio, dependiendo también de la copa RFEF y los equipos de Tercera. En principio, jugar los fines de semana contra equipos de nuestra categoría o superior, y entre semana contra rivales de Tercera.

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