El Obradoiro revisa el partido de Copa, entre la ansiedad y la oportunidad de ser palanca para tomar impulso

SANTIAGO

XOAN A. SOLER

El entrenador apela a la intensidad, el esfuerzo, el compromiso y el trabajo defensivo para seguir creciendo

10 ene 2025 . Actualizado a las 19:49 h.

El Monbus Obradoiro sacó adelante con mucho sufrimiento el partido de Copa frente al Valladolid. Félix Alonso no hizo una lectura ventajista al respecto, pero no dejó de buscar también el lado positivo y las opciones que puede abrir ese triunfo.

Tiene claro dónde poner la lupa después de una victoria que debe reportar «confianza» y que rompió una racha de derrotas: «Tiene que ser una palanca para impulsarnos. El partido del otro día puede ser un punto de inflexión, pero no es un partido de Liga y donde tenemos que sumar es en la Liga. Evidentemente, el poder disputar un título es algo estimulante para cualquier deportista, pero el foco tenemos que centrarlo en lo que es la competición».

Al echar la vista atrás, y después de analizar fríamente esa contienda de Copa, volvió a recordar que se enfrentaban dos equipos necesitados, en un mal momento de juego y anímico. Y reconoció que ante otro rival, en otras circunstancias, el Obradoiro quizás no hubiese podido remontar trece puntos.

Puso sobre la mesa datos que hablan claramente de esa ansiedad: «Hacemos siete tiros de tres completamente abiertos que fallamos, y fallamos ocho bandejas. Hay dos acciones consecutivas de Balvin, dos pérdidas de balón en un saque de fondo. Ellos fallan, cogemos el rebote e intenta pasar a Sergi Quintela, y el balón se va a la banda. Solo se explican a través de la ansiedad que puede tener un equipo».

Del encuentro del martes se queda con «la intensidad, el esfuerzo y el compromiso» del plantel. Y con el trabajo defensivo. Fueron los pilares sobre los cuales el Obradoiro edificó la remontada y apunta que esa debe ser también la base para seguir creciendo en la competición doméstica.

Félix Alonso volvió a indicar que vio una gran respuesta del equipo en el plano de la preparación física: «Sergi Quintela, Micovic y Millán Jiménez juegan los diez últimos minutos del partido enteros, con un nivel de exigencia físico altísimo. Es obvio que el equipo físicamente está bien, lo que necesitamos es liberarnos de toda esta tensión, del exceso de responsabilidad y demás, y empezar a jugar bien a baloncesto».

Esa velocidad de crucero la percibió, en algunos tramos, en Alicante. Falta encontrar la continuidad, y también el equilibrio entre el ataque y la defensa, rayando a un buen nivel en ambos lados de la cancha.