Arzúa renueva las instalaciones de la biblioteca local después de veinticinco años de servicio
ARZÚA
La nueva biblioteca municipal de Arzúa abrió ayer al público sus puertas en un espacio que, en dimensiones, quintuplica la estancia de la casa consistorial que albergó el servicio desde su puesta en funcionamiento hace 25 años. El centro sociocultural María Mariño de la localidad acoge las renovadas instalaciones, que ocupan trescientos cincuenta metros cuadrados distribuidos en salas adaptadas a las necesidades de los usuarios del servicio.
La conselleira de Cultura, Ánxela Bugallo, presidió junto con el alcalde arzuano, Xaquín García, el acto que se celebró para inaugurar la biblioteca, que se habilitó con una inversión de 130.000 aportados por el departamento autonómico a través de la Dirección Xeral de Creación e Difusión Cultural. Las dependencias, dotadas de red inalámbrica de acceso a Internet, se dividen en una sala de lectura para adultos, una zona infantil, y un área juvenil con material audiovisual y multimedia, además de seis ordenadores con acceso a la Red. Una sala para cuentacuentos y una hemeroteca para consultar la prensa diaria así como publicaciones periódicas completan las instalaciones.
El encargado de la biblioteca municipal de Arzúa desde su creación, Ramón Torreiro, destacó que las nuevas instalaciones responden a su concepto de servicio. «Son, en certo modo, as que eu quería», afirmó Torreiro, que admitió las limitaciones que tanto a su propio trabajo como a los usuarios imponían las antiguas dependencias al disponer de 70 metros cuadrados. La ampliación materializada en el acondicionamiento de un nuevo espacio no solo aportará mayor comodidad a los más de 1.300 socios de la biblioteca municipal, que también podrán hacer uso de más servicios alternativos al préstamo de libros al haberse dotado las dependencias de material audiovisual y multimedia, y de acceso a Internet. Es el añadido a un fondo de 15.300 volúmenes.
Recorrido literario
Ramón Torreiro ejerció de guía en el recorrido que las autoridades y demás público asistente al acto inaugural de la biblioteca realizaron por las instalaciones. La lectura de textos literarios en las distintas salas del centro caracterizó la visita, que contó con la presencia de un invitado de excepción: Avelino Pousa Antelo. El ilustre galleguista tomó la palabra para dar lectura a un fragmento del texto Notas encol da vila de Arzúa, publicado en la Revista Nós bajo la firma de Aureliano Pardo Villar, un intelectual natural de Arzúa al que se le rindió homenaje con motivo del cincuenta aniversario de su fallecimiento.
La inauguración de la biblioteca de Arzúa también se convirtió en un acto en homenaje a Rosalía de Castro. La poeta de Iria Flavia da nombre al nuevo centro y en su recuerdo se leyó el poema Unha vez tiven un cravo. Una joven arzuana recitó los versos, que sonaron entrecortados por el sonido de un violín con el que un profesor del conservatorio municipal interpretó la partitura que musicalizó otro clásico de la escritora gallega por excelencia: Negra Sombra.