El alcalde melidense pide iluminar los pasos de peatones en dos travesías
29 ene 2025 . Actualizado a las 15:32 h.El mal tiempo obstaculiza la agenda del Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana para la inauguración del tramo de la A-54 desde el municipio lucense de Palas de Rei, que finalmente no se abrirá al tráfico rodado esta semana, tal y como se indicó cuando el pasado diciembre se aplazó la entrada en servicio de la vía de alta capacidad. Las lluvias ralentizan los trabajos de asfaltado y de pintando de la calzada, por la que está previsto que empiecen a rodar los vehículos la semana próxima. Es la estimación de la que, sin concreción de fecha alguna, tuvo conocimiento este martes el alcalde de Melide, el independiente José Manuel Pérez, en la reunión que mantuvo con la subdelegada del Gobierno en A Coruña, María Rivas, el jefe de Demarcación de Carreteras del Estado en Galicia, Ángel González del Río, técnicos del organismo estatal, así como de Acciona, la empresa que ejecuta las obras en el que es el penúltimo tramo de la autovía Lugo-Santiago que se abrirá al tráfico.
El encuentro sirvió para confirmar las medidas que las diferentes partes abordaron en una primera reunión a finales del pasado noviembre, y también para concretar las propuestas del regidor melidense para minimizar el impacto del tráfico rodado —estimado en 8.000 vehículos diarios, de los que 800 son camiones— tanto en el centro urbano, como en la travesía de la carretera autonómica AC-840, que será la de acceso al enlace de la A-54. Así, a la eliminación de las isletas del centro urbano de Melide y a la deconstrucción de la glorieta para que los vehículos pesados ganen espacio en los giros —sendas medidas ya están ejecutadas— podrían sumarse la iluminación de diferentes pasos de peatones. El alcalde de Melide, a quien se le emplazó para una nueva reunión «nuns días», asegura que los representantes del Ministerio de Transportes se mostraron «absolutamente receptivos» ante la medida reforzar con iluminación led —en horizontal parar los peatones y en vertical para los vehículos— los pasos de cebra del tramo urbano de la AC-840, así como los existentes, ya en la travesía urbana de la carretera nacional N-547, a la altura del cruce de Santa María, por el que los peregrinos salen del casco urbano, en el señalizado en la confluencia con el acceso al casco viejo por A Moa, y en el paso de peatones, localizado en el tramo de la avenida de Lugo que concentra mayor actividad hostelera. Este último es un tramo de travesía por el que también discurre el Camino Francés. El regidor melidense solicitó, además, regular mediante semáforo el paso de cebra señalizado, en el centro urbano, a la altura de la confluencia de la carretera nacional con la avenida de La Habana.
Además, Jose Manuel Pérez planteó una medida para aliviar la densidad del tráfico rodado en el centro urbano: desviar, a través del campo de la feria, los vehículos pesados que se dirigen al polígono industrial de Melide. Se señalizará en el cruce de la travesía de la AC-840 con la rúa Circunvalación Campo Feira, por la que ya se redireccionan los vehículos hasta la nacional 547 cuando, en las fiestas de agosto, se corta al tráfico rodado para las orquestas.