Zonas altas de monte de Padrón, Rois y Dodro permiten contemplar vistas espectaculares
13 ene 2019 . Actualizado a las 04:58 h.La comarca del Sar es un gran mirador. Desde varios puntos altos de montes de Padrón, Rois y Dodro se aprecian vistas espectaculares, desde la capital de Galicia a la ría de Arousa y el mar, entre otras localizaciones. Salvo excepciones, esos lugares no están señalizados como miradores, pero la subida a los montes Meda en Padrón, A Cabana en Rois o Treito, en este caso en la zona de Dodro, deja unas vistas de pájaro dignas de contemplar y fotografiar.
En general, las zonas altas de monte desde las que perder la vista tienen buenos accesos, salvo los tramos finales, como es el caso de la Cabana o el Treito. El de más fácil acceso es el mirador de más reciente creación, el del monte Lapido, en Padrón, adecentado a iniciativa de la Comunidade de Montes Veciñais en Man Común de Lapido, que convirtió un antiguo basurero en una zona con vistas al río Ulla y al monte Castro Valente, todo ello a pie de la carretera AC-242 que conduce a la parroquia de Carcacía.
Muy cerca de allí, también en Padrón, la subida al monte Meda depara unas vistas hermosas, hacia Cacheiras, Milladoiro y zonas de A Estrada, así como a los montes Castro Valente, Xesteiras, Xiabre o Pico Sacro. Y en la zona de las antenas, como la llaman los cazadores, están las mejores vistas ya que se divisa la ría de Arousa.
En Dodro, destacan los miradores de Lestrobe y Bexo, aunque este último no está señalizado como tal. Desde Bexo se pueden apreciar lo que algunos consideran las "mellores vistas ao río Ulla".
En el monte A Cabana, en Rois, está señalizada la vista panorámica en la aldea de subida, en Macedos, en la parroquia de Urdilde y desde lo alto, en la zona conocida como A Caseta se aprecia, a simple vista, la Ciudad de la Cultura y, con prismáticos, hasta la catedral de Santiago. También se avista el Pico Sacro y zonas de Negreira.
En el monte Treito, dentro del parque éolico del mismo nombre, están, quizás, las mejores vistas de la comarca y, en un día de buena visibilidad, se puede apreciar y sin prismáticos hasta el puente de la Illa de Arousa. También se distinguen bien las bateas de mejillones en la ría, islas como Sálvora o Cortegada y, en la otra mano, hasta la Ciudad de la Cultura, aunque más difusa que desde el monte de A Cabana.
Padrón, Rois y Dodro tienen en estos espacios recursos sin explotar, como lo demuestra que no están señalizados ni acondicionados como miradores, aunque estén situados en terrenos de titularidad privada, en varios casos. Son lugares que hablan de la belleza de la propia comarca y de los territorios próximos.