La padronesa Loli Costa cierra la etapa de su vida como víctima de violencia machista y lo hace sin rencor, «porque, do contrario, non vives», asegura
23 nov 2025 . Actualizado a las 05:00 h.Cuatro años después de hacer público su testimonio como mujer maltratada, la vecina de Padrón Loli Costa, de 58 años, accede a volver a hablar para insistir en el mensaje que quiso transmitir cuando sacó a la luz su caso de violencia machista: «O primeiro de todo é denunciar ao agresor; é a única saída, non hai outra; sei que é difícil porque o pasas moi mal, pero non estamos soas».
Su relato de entonces conmocionó por su valentía y determinación, algo que mantiene en la actualidad, cuando da por cerrada una etapa de su vida, los siete años que pasaron desde que denunció a su maltratador, que fue condenado, hasta el pasado mes de octubre, cuando venció la orden de alejamiento que el juzgado le impuso a su agresor.
Como ya hizo hace cuatro años, Loli Costa insiste: «Animo a todas as mulleres que sofren maltrato a denunciar e que non anden coa cabeza baixa; quen ten que andar así é o maltratador». Confiesa que, en la actualidad, ella ya no siente rencor hacia el hombre que la maltrató «porque, do contrario, non vives, non avanzas e eu dou por pechada esa etapa». No obstante, explica que «para denunciar e saír adiante si que tes que ter rancor e rabia».
La vecina de Padrón quiso hacer público su caso por ella y por otras y, de hecho, su testimonio hizo que alguna mujer víctima de violencia machista diera el paso de denunciar, según explica. Ahora, en vísperas de la fecha del 25 de noviembre, deja otro mensaje: «Se algunha muller en situación de maltrato lee isto, que saiba que eu estou disposta a axudala no que poida, que contacte comigo por privado», al tiempo que recuerda que también están los centros de información a la mujer, que funcionan muy bien y que prestan servicios gratuitos, señala. Loli Costa quiere seguir adelante con su vida y lo hace agradecida con todas las personas que la ayudaron y apoyaron en todo el proceso.
Agradecimientos
Así, la vecina de Padrón explica que «nunca me sentín desamparada» desde el momento en que decidió denunciar a su agresor. Para empezar, además de su familia, contó con el gran apoyo de su abogado, Rubén Aguilar, en un momento en el que «estaba perdida de todo», señala. Cuando denunció, fue derivada al Centro de Información á Muller Terras de Iria, situado en Padrón, en cuyas profesionales, la abogada Isabel Ramos y la psicóloga Mercedes Regos, encontró apoyo legal, emocional y psicológico. También lo encontró en la Guardia Civil de Padrón y, en el equipo Viogen de la Comandancia de Noia, del que quiere destacar el nombre del agente Jorge. «Grazas por estar sete anos pendentes de min; sempre me sentín moi protexida», asegura la afectada, quien añade que «estou moi agradecida polo que o meu pobo fixo por min».
La vecina de Padrón afirma que «é importante pechar unha etapa así aínda que sei que, se preciso calquera cousa, están aí para axudarme» y reconoce, además, que «hai cousas que quedan para a vida, pero tes que vivir con elas e pouco a pouco saír para adiante». Así, cuenta que ella, en la actualidad, empieza a poder «falar tranquilamente» de la situación de maltrato que vivió durante cuatro años.
«Eu vinme morta e por iso denuncie. A min, ese home xa me tiña anulada, pero non fai falla esperar tanto. Somos loitadoras», reivindica esta mujer. Luchadora, pero también valiente, Loli Costa asegura que «fíxome ben facer pública a miña situación».