
La propiedad volverá al Concello de Santa Comba, que la cedió
29 mar 2025 . Actualizado a las 05:05 h.La Mancomunidade de Concellos Xallas-Tines-Tambre (A Baña, Carnota, Mazaricos, Muros, Negreira, Outes y Santa Comba), acordó ayer su disolución definitiva poniendo fin a un largo calvario para los siete ayuntamientos que la integraban y, que se inicio en enero del 2007 por un incendio que devastó las instalaciones del matadero mancomunado de A Pereira, en el municipio de Santa Comba. En el 2023 la mancomunidad de municipios saldó la deuda de 100.000 euros contraída con Abanca tras avalar un préstamo concedido en su día a la Asociación de Carniceiros Xallas-Barbanza, concesionaria del servicio de matanza, para la puesta en marcha del matadero.
La compleja situación administrativa y judicial generada tras la desaparición de la instalación llevó a la agrupación de municipios a gestionar casi un cuarto de siglo después, una quinta con la entidad bancaria que inicialmente solicitaba 700.000 euros hasta dejarla en los cien mil euros. Una deuda zanjada en el 2023 por algo más de 14.000 euros por municipio, a la que ahora deberán añadir algo más de 1.500 euros en gastos de liquidación para la disolución definitiva de la entidad de concellos. «Aprobouse dar carpetazo dunha vez a esta mancomunidade e deixarnos de atopar con gastos de préstamos e outras cargas despois de tantos anos», aseguró el alcalde negreirés, Manuel Ángel Leis Míguez, quien recuerda que inicialmente Abanca reclamó 700.000 euros, que luego bajó a 450.000 para finalmente establecer la deuda en 100.000 euros, a pagar en partes proporcionales.
El segundo acuerdo importante es revertir la propiedad al Concello de Santa Comba, algo en lo que los siete integrantes estuvieron de acuerdo por cuanto en su día fue quien la cedió para crear el matadero con diferentes objetivos tales como que la instalación estuviese operativa más de treinta años, algo que no ocurrió y, que el matadero no echase más de dos años sin actividad ininterrumpida, que tampoco sucedió. Hay que recordar que en el año 2012 la Corporación municipal de Santa Comba acordó en pleno solicitar la reversión de los terrenos debido a que no existía actividad alguna desde el incendio registrado en enero de 2007.
Un proyecto gafado desde sus inicios
El matadero de A Pereira comenzó como un proyecto de sala de matanzas comarcal impulsado por los ayuntamientos de Santa Comba y Mazaricos, allá por el año 1984. Sin embargo, las obras no acabaron de cuajar por las desviaciones entre lo presupuestado y el coste final. Fue en 1997 cuando se retomaron y se constituyó la mancomunidad que hizo una concesión administrativa a la Asociación de Carniceros Xallas-Barbanza, avalando un crédito necesario para la puesta en funcionamiento de las instalaciones en abril de 1999. El escaso volumen de matanzas y los elevados costes de mantenimiento, además de agravarse con la crisis del mal de las vacas locas desembocó en 2001 en una ampliación de capital de la entidad y la entrada de un nuevo socio mayoritario; el empresario del sector lácteo, Jesús Pérez. Su etapa fue la de mayor actividad del matadero hasta el incendio de enero de 2007. Se dijo que gracias a la póliza del seguro se reconstruiría y mantendrían la veintena de puestos de trabajo. El tiempo fue pasando y nunca más se reconstruyó.