El alcalde de Santiago tacha de irresponsable al PP y ve revanchismo de CA con el Peleteiro

r. martínez SANTIAGO / LA VOZ

SANTIAGO CIUDAD

Intervención de José Antonio Seijas ante el pleno que debatió la propuesta del Peleteiro, con Xosé Manuel Durán (de azul) sentado detrás y quien también defendió la posición de Raigame ante la corporación
Intervención de José Antonio Seijas ante el pleno que debatió la propuesta del Peleteiro, con Xosé Manuel Durán (de azul) sentado detrás y quien también defendió la posición de Raigame ante la corporación Sandra Alonso

El fracaso de la iniciativa deja «unha espada de Damocles» sobre la zona, dice Sánchez Bugallo

23 dic 2022 . Actualizado a las 17:28 h.

El fracaso del nuevo intento de desarrollar el solar del Peleteiro con un uso más residencial que comercial ha derivado en una espiral de reproches de la que inicialmente solo se salva el BNG (su voto no es decisivo) y de la que no rehúyen las entidades comerciales que han participado en la comisión que en los dos últimos años ha valorado las propuestas para la parcela. En su caso, el tono es más comedido, aunque no la decepción por un fracaso que, para el alcalde, deja una «espada de Damocles sobre el Ensanche», especialmente sobre el comercio, por la posibilidad de que la propietaria del solar desarrolle el centro comercial que admite el planeamiento actual (casi la mitad de sus 23.500 metros de edificabilidad tienen ese uso), aunque espera que no se llegue a eso.

Los socialistas no se esperaban que Compostela Aberta se fuese a abstener después de asegurar en mayo que viabilizarían la reconversión de usos que anteayer se llevó al pleno si se garantizaba que la calle República Arxentina tendría una abertura de 20 metros a la plaza resultante en la zona. «Iso garantiuse», pero CA, sin previo aviso, «non apoiou» la propuesta, indicó ayer el alcalde, Xosé Sánchez Bugallo. Y viabilizar, en este caso, significaba expresamente apoyar la iniciativa, porque precisaba mayoría absoluta, apuntó la concejala de Urbanismo, Mercedes Rosón.

«Son moi conscientes do que fixeron e terán que xustificar a súa decisión», decía la edila, aunque más allá de la justificación del voto de la formación municipalista en la falta de consenso total con los vecinos y la inseguridad jurídica que eso podría implicar, el alcalde entiende que el relevo en la portavocía del grupo (ahora lo dirige María Rozas) y la proximidad de las elecciones tuvieron que ver con ese cambio, así como «un intento de axuste de contas». El PSOE no respaldó en el 2019 la iniciativa de CA, entonces en el gobierno, para esa misma parcela.

Con todo, y pese a que CA, «sen ternos dito nada, incumpriu a palabra dada», para el alcalde es «moito máis grave o do PP», con una propuesta «irreal» —implica, dice, la inversión de no menos de 45 millones entre la compra del solar y su equipamiento público— y orientada a «eludir calquera responsabilidade e non viabilizar que isto saia adiante». Y es más grave, expone, por la representación que ostenta, por que en su día apoyó también la edificabilidad de 23.500 metros con un gran peso comercial —«eran outros tempos»— y por que las disculpas que pone «son un insulto á intelixencia». «O PP mantivo unha posición irresponsable e mesmo cínica condenando ao Ensanche á parálise», concluyó Bugallo tras indicar que «pelotazo urbanístico» fue lo que pretendió Conde Roa en O Espiño.

Verea: se decidirá en las urnas

El candidato popular, Borja Verea, pedía ayer al alcalde «que deixe de facer o ridículo», pero, sobre todo, que deje «esa soberbia de falar polos 26.000 veciños do Ensanche» en relación a la parcela del Peleteiro. Verea sostiene que serán los vecinos los que decidan en las urnas lo que quieren, si la propuesta del PSOE «e os seus aliados», que «apostan por pisos de luxo, ladrillo, pelotazo e políticas de hai 20 anos», o la del PP, «clara, firme e solvente»: la de recuperar el solar para los vecinos (el PP plantea su compra) y la implantación de una residencia de mayores, centro de día, cultural, parque infantil, zonas deportivas, piscina, gimnasio y sala multiusos.

El presente y lo que se plantea

El actual planeamiento otorga 23.500 metros de edificabilidad: 12.000 comercial, 4.500 residencial (45 pisos), 900 para sociocultural y uso hotelero y admite dos alturas más, según Bugallo, que el que se pretendía aprobar. La propuesta rechazada rebaja la edificabilidad a 19.900, elimina el uso hotelero, deja en 3.500 el comercial y sube a 15.500 el residencial (150 pisos) y comprometía una plaza pública de 1.400 (ahora más tipo calle), párking (mínimo 400 plazas), centro de día y otro cultural.

El Ensanche: entre la decepción del comercio y el aplauso de Raigame

Los ánimos se movían ayer en el Ensanche entre la decepción del comercio, que estaba con la solución del gobierno, y la satisfacción del colectivo vecinal Raigame, que se oponía. Desde el sector comercial entienden que han primado los intereses políticos sobre los de los ciudadanos cuando «había un acuerdo consensuado» del que «se han desmarcado la asociación vecinal y algún político», afirma José María Fernández, presidente de Santiago Centro y «totalmente desencantado» con el resultado del pleno, que obliga a «esperar de nuevo». Y todo «por cuestiones políticas, porque al final todo es política».

Fernández se pregunta a qué vecinos contrarios a la iniciativa representa Raigame. También lo hace José Antonio Seijas, presidente de Comercio Punto Compostela, igual de decepcionado, porque «todo o que pedía Raigame» se le concedió, dijo, al tiempo que recordó el compromiso de CA de viabilizar el proyecto. Y advierte que con ellos no cuenten ya, después de estar varios años «indo á esa mesa» para que finalmente no se tenga en cuenta su opinión y para que, «cando en maio había consenso», un partido «agora se absteña».

Para Seijas, el rechazo del plan ha sido «un error grave», aunque para el presidente de Raigame, Xosé Manuel Durán, es una ocasión para seguir buscando un proyecto que convenza a todos. Afirma que la asociación impulsará debates sobre esas opciones y recuerda que está la de la abertura de la plaza 30 metros a cada lado, aunque, según el alcalde, esa ya se valoró y descartó. Con todo, el alcalde

sigue abierto a valorar propuestas que mejoren y no sean un paso atrás.