La ceremonia fue oficiada por un concejal de Izquierda Unida Emilio Menéndez y Carlos Baturín son los primeros que se acogen a la nueva ley
11 jul 2005 . Actualizado a las 07:00 h.?l español Emilio Menéndez y el estadounidense Carlos Baturín celebraron ayer en Tres Cantos la primera boda entre homosexuales, ocho días después de que la nueva ley entrara en vigor, en un ambiente muy emotivo y reivindicativo. El concejal que ofició la ceremonia fue José Luis Martínez Cestau, quien aseguró sentir «especial ilusión» ante una ceremonia que ponía fin a «una serie de injusticias» y era un «ejemplo de igualdad». La boda duró alrededor de quince minutos y se desarrolló en medio de la expectación de numerosos medios informativos tanto nacionales como internacionales. Asistieron una veintena de familiares y amigos, además de representantes del movimiento gay como el socialista Pedro Zerolo, a pesar de que la pareja había declarado que deseaba una ceremonia íntima. Los cónyuges, que han residido en Massachusetts, -el único Estado estadounidense que permite el matrimonio entre personas del mismo sexo- salieron en medio de una lluvia de arroz en el que consideraron el día «más feliz» de su vida. Emilio y Carlos dieron las gracias al Gobierno, a José Luis Rodríguez Zapatero, a todos los políticos que han apoyado la ley y también a los funcionarios del Ayuntamiento de Tres Cantos. Y añadieron: «Somos familia y como somos familia hemos querido casarnos como hacen todas las familias». Críticas a la iglesia Emilio se definió como católico pero dijo que se está planteando dejar de serlo porque le ha llenado de tristeza que los obispos se revuelvan ante una ley «que no les afecta» y que a los homosexuales les «llena de felicidad». En su discurso subrayó que «aquí hay mucho amor y no lo había en la manifestación del 18 de junio» (convocada por el Foro de la Familia) y que «amarse es muy cristiano, pero lo que no es cristiano es negar los derechos a otras personas». El concejal de Izquieda Unida recordó la Declaración Universal de Derechos Humanos, la Constitución y el Código Civil para destacar que los españoles son iguales ante la ley, sin distinciones, y remató la ceremonia con unos versos de Pablo Neruda y un deseo: «Que la risa y la ternura os acompañen toda la vida».