Las estrellas actúan en fiestas privadas a golpe de talonario

Ignacio Ortega MOSCÚ

SOCIEDAD

Los oligarcas rusos se dan el lujo de contratar a cantantes de renombre para celebrar un cumpleaños o despedir el año. George Michel acaba de cobrar 2,5 millones de dólares

03 ene 2007 . Actualizado a las 06:00 h.

Los oligarcas rusos ya no se contentan con adquirir grandes compañías o clubes de fútbol. Ahora pagan millones de dólares para que estrellas de la música de la talla de George Michael, Shakira o Beyoncé actúen en sus fiestas privadas. Un cumpleaños, un aniversario de bodas o la fiesta de Fin de Año es excusa suficiente para que un multimillonario ruso se de el gusto de contratar por una noche a cantantes que habitualmente actúan ante miles de espectadores. George Michael recibió 2,5 millones de dólares por sólo 20 minutos de actuación durante la exclusiva fiesta que un oligarca ofreció el pasado 31 de diciembre. El empresario fletó de su bolsillo un avión para que Michael, sus músicos y cantantes pudieran volar a Moscú, actuar ante 300 invitados y regresar horas después a Londres. Esos honorarios lo convirtieron en el cantante mejor pagado de la historia de Rusia. Robbie Williams Hasta ahora ese honor recaía en el ex miembro de Take That y rey del pop británico Robbie Williams, la actriz y cantante Jennifer Lopez, y la estadounidense de origen ecuatoriano Cristina Aguilera. Williams, famoso por sus excentricidades dentro y fuera de los escenarios, se embolsó dos millones de dólares por ofrecer un concierto privado en la pasada Nochebuena. Lopez recibió los mismos honorarios por interpretar cuatro canciones en la fiesta con motivo de la onomástica del millonario Telman Ismailov. La cifra inicial era 1,5 millones de dólares, pero como la actuación se retrasó, a instancia de los anfitriones, empezó a cobrar 200.000 dólares por cada 10 minutos de demora. La misma cantidad se había embolsado Aguilera por interpretar tres canciones en la fiesta de cumpleaños del empresario ruso Andréi Melnichenko en septiembre del 2005. Shakira, Kylie Minogue, Pink y Beyoncé son otros cantantes que han recibido cifras millonarias por sus actuaciones. Además, los oligarcas no se conforman con contratar sólo a cantantes, sino también a estrellas de cine para que hagan de maestros de ceremonias. Pierce Brosnan cobró 2,5 millones de dólares por presentar un concierto privado, mientras que Danny de Vito se llevó 800.000 dólares por sus cualidades cómicas.