El tráfico separa a Charlene y Alberto

redacción / la voz

SOCIEDAD

Explicación «oficial» a su noche por separado

14 jul 2011 . Actualizado a las 06:00 h.

Las explicaciones oficiales son, habitualmente, historias más o menos digeribles pero con visos de realidad. Habitualmente, porque lo que ha dicho el padre de Charlene Wittstock para explicar los 16 kilómetros que median entre las habitaciones de su hija y su recién estrenado esposo -léase Alberto de Mónaco- es casi delirante. Según el exvendedor sudafricano, lo que ocurrió fue lo siguiente: «La sesión del Comité Olímpico Internacional se celebró en el hotel Hilton y comenzaba a las siete de la mañana. Alberto se quedó allí para no tener problemas con el tráfico», y añadió que «ninguna de las historias escandalosas que se están contando son ciertas. La prensa sudafricana debería apoyar a Charlene en vez de difundir rumores». Lo dijo, claro está, ante un diario local, el Die Burger, cuando fue otro, City Press, el que desveló la distancia entre las suites de los enamorados. Según el suegro, los tortolitos disfrutan ahora de su amor en un lugar secreto.